- Figuras del sector político, económico, social y del folclor acudieron a la Misa Mayor, presidida por el Obispo, Monseñor Oscar José Vélez.
Permitir que Jesús gobierne en todos los aspectos de la vida, en medio de un profundo acto de fe; y propiciar un camino de purificación donde sólo se rinda culto al Todopoderoso, fue la exhortación central del Obispo de Valledupar, Monseñor Oscar José Vélez Isaza, a los fieles que asistieron ayer a la celebración eucarística del Santo Ecce Homo.
El presbítero recriminó de manera enfática los caminos que está tomando la humanidad, en búsqueda de una felicidad ilusoria: Éxito a cualquier precio, formas engañosas de religión o superstición; droga, sexo desenfrenado, homosexualismo, idolatría al dinero y la fama, aspectos que catalogó como falsos dioses que están llevando al abismo a los seres humanos, en la medida que terminan convertidos en ídolos, dejando a un lado a Dios.
También se refirió al relativismo que impera en la sociedad, donde todo lo mismo, “algunas personas no les interesa conservar la vida o atentar contra ella, un matrimonio homosexual o uno heterosexual. Aquí el que se destruye es el ser humano porque termina siendo víctima de su propio invento, por eso tenemos que afianzarnos cada día en la búsqueda del Creador y de sus mandamientos, para construir una sociedad en paz”, subrayó.
El Obispo recordó que el 2013 es el año de la fe que invita a comprometerse cada día en el rescate del valor religioso, porque muchas veces se quiere arrinconar, colocando de ejemplo un periodista que en el marco de la elección del Papa Francisco aseguraba que la religión estaba bien, pero que no era necesario que hablara ni del bien ni de la verdad. “Entonces de qué va a hablar de cocina, de folclor o de qué, si la tarea de la Iglesia es anunciar la verdad y enseñar el camino del bien. Muchas veces se quiere amordazar la verdad y la Iglesia necesita los espacios necesarios para ello. Ese sería el compromiso que les solicito a las autoridades, que velen siempre por el respeto de la libertad religiosa en la sociedad, no sólo de la Iglesia Católica, sino para todos lo que profesan un credo”, puntualizó el jerarca de la iglesia católica del Cesar.
Vallenatos cumplieron su cita con el Ecce Homo
Ataviados con sus mejores galas, con sus corazones dispuestos a recibir las bendiciones del Señor, las familias que habitan Valledupar y en poblaciones cercanas asistieron puntualmente a las homilías en honor al santo patrono de Valledupar que se celebraron cada hora. Miles de creyentes concurrieron ayer en romería desde las cuatro de la madrugada cuando el templo de ‘La Inmaculada Concepción’ abrió sus puertas.
Durante la Misa Mayor, oficiada por el Obispo, Monseñor Oscar José Vélez, la parroquia estuvo atiborrada de personas –como es tradicional-; algunas de ellas debieron escuchar la prédica en sillas plásticas que fueron dispuestas para ello en las afueras del templo.
Cuando cayó el sol se dio paso a una multitudinaria procesión. Las calles se convirtieron en ríos de gente que con fervor caminaron alrededor de la imagen de Jesús en color oscuro, atado a un poste de madera, adornado con flores rojas.
El pueblo se reencontró con su patrono, exaltándolo, rogándole mejorías en la salud y milagros, o simplemente, celebrando su regreso a las calles con una fe y perseverancia extraordianaria.