No lo digo yo, lo dice en el Semanario La Calle en forma airada, valerosa y cojonuda la voz autorizada del Representante Conservador, Ape Cuello: “Los policías de vacaciones y los delincuentes de ferias en Valledupar” y lo hace en forma solitaria ante el silencio de sus compañeros del Congreso, que para estos temas de orden público, no les gusta opinar, porque parece que les da miedo meterse con “mí” General, Coronel o Capitán como si fueran sumisos y humildes soldados y para explicarlo agrega: “Valledupar se ha convertido en un paraíso para los delincuentes a causa de la negligencia de la Policía Nacional que parece que le importara poco lo que sucede en materia de seguridad en la ciudad, posesionaron a un Comandante que sale de vacaciones al día siguiente por cincuenta días, lógicamente no conoce la ciudad ni recibió el Comando y el Subcomandante también está de vacaciones, vino el Ministro de Defensa a echarnos mentiras, ofreció 150 policías y no ha llegado ni uno y los que llegaron por dos semanas se la pasaron dando vueltas en unas poderosas motos y chateando en las esquinas. Para el Festival Vallenato llegaron unos Agentes que acabada la fiesta, hicieron su agosto repartiendo partes y recogiendo motos y carros con las grúas, se fueron y quedaron los mismos escasos policías que se ha probado de mil maneras que no tienen como responder a la seguridad de la ciudad, son insuficientes y además agregó que se pasan por la faja muchas situaciones que al parecer conocen al dedillo, se hacen los de las gafas rotas según sus conveniencias, saben dónde están las guacas delictivas, dónde se alquilan las armas, dónde se expende la droga, pero no hacen retén en las puertas de esas guacas, que la policía y gran parte de la comunidad saben dónde quedan”.
¿Dice el Representante Ape mentiras? No, esa es la triste realidad que estamos viviendo en esta ciudad, bombardeada por el delito por todos sus flancos, que hay un temor generalizado que pasó a pánico colectivo, donde la frase usual es que en Valledupar ya no se puede vivir y que yo no comparto, pues sostengo que esta ciudad a pesar de todo es el mejor vividero del mundo y que lo que debemos de hacer es colaborar denunciando el delito para tratar de erradicarlo, pero por lo pronto la situación me está haciendo recordar los tenebrosos tiempos cuando la guerrilla sacaba a la gente de los aposentos para llevárselos y el comercio cerraba a las 4 de la tarde por temor a que fueran atracados, aquí matan por capricho para llevarse un celular o cualquier vaina y la policía tiene que retomar la rienda del brioso corcel, pues por ahora parece un caballo viejo y cansado que nada les importa. ¿Será que habrá que hacer un relevo total para conseguir que Valledupar sea una ciudad segura?, la policía tiene todas las herramientas para conseguirlo, carros, motos, equipos de comunicación, combustible, armas, sólo falta que se vacunen y apliquen “la inteligencia”. Señores de la policía, manos a la obra pero sin atropellos ni excesos a la ciudadanía que está presta a colaborar. Felicitaciones al Parlamentario Ape Cuello, así es la vaina.
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En la calle la gente me dice que me tienen de chercha, pues las recomendaciones que aquí hago no las tienen en cuenta. No importa, quien se perjudica es la ciudad y yo continúo con mi cantaleta hasta cuando San Juan agache el dedo: Alcalde, en la carrera 8 entre calles 17 y 18 hay varios árboles secos esperando que se les reemplace y las troneras en el pavimento de la calle 12 entre carreras 10 y 11 día a día crecen más.