Seis días duro su lucha contra la muerte: el exfutbolista y asistente técnico de las selecciones Juvenil y Prejuvenil del Cesar, Giribeth Cotes, falleció cuando le hacían el ingreso a una clínica de la capital del Atlántico.
Muchas historias detrás del exgoleador de la Primera B en 2005, las mismas que recordaron algunos de sus colegas, amigos y deportistas en un inmueble del barrio Simón Bolívar.
“Giri fue una persona muy noble, a él lo atacaban mucho porque no era brillante con el balón, pero a muchos les calló la boca cuando con las decenas de goles que marcó sacó de apuros al Valledupar Fútbol Club”, recordó Miguel Maestre García, un humilde vendedor de jugos que no esconde el dolor por la partida del vallenato.
El exjugador Hermes Martínez no contuvo sus lágrimas al recordar la calidad de persona que fue Giribeth Cotes. “Él fue una persona muy amigable, siempre estaba ahí, buen padre, buen hijo, buen hermano, pero esta es la ley divina, Dios lo necesitaba”, lamentó el exzaguero de Millonarios
El pasado 6 de abril, Giribeth Cotes fue internado en la Clínica del Cesar debido a una afección hepática: el parte médico indicó en ese momento que el exjugador padecía pancreatitis, lo que generó una cadena de afecciones que comprometió otros órganos como el hígado, el cual le produjo su inflamación.
Por su grave estado de salud, fue trasladado el viernes en horas de la noche a la Clínica de la Costa en la capital del Atlántico, sin embargo, su deceso se produjo minutos después de llegar a ese centro asistencial
“Durante el vuelo, sufrió un paro y otro después de haber ingresado a la clínica, él murió como a las once de la noche”, dijo un familiar de quien estaba inscrito para jugar con la Selección Cesar en el Zonal Sénior Máster que arrancó ayer en Valledupar.
Su historia
En el año 2006, Giribeth Cotes salió como máximo artillero de la primera división del fútbol salvadoreño, vistiendo la camiseta de Águilas; antes fue el goleador de la Primera B con los colores del Valledupar Fútbol Club. También tuvo un paso fugaz por clubes como Rionegro de Antioquia, Alianza Petrolera, Bajo Cauca, Girardot y Floridablanca. En el ámbito aficionado, hizo parte de una selección infantil de su departamento.
Sus goles también fueron noticia en una selección Colombia Prejuvenil, (1993) al lado del internacional Jorge Bolaño, quien posteriormente fue figura con el Junior de Barranquilla y luego con el Parma de Italia. Jugó seis partidos profesionales con la blusa del Atlético Bucaramanga.
El exjugador del Valledupar Fútbol Club, nacido en La Paz, Cesar, será sepultado a las 3:00 de la tarde de este domingo en un cementerio de esta capital.
Por Nibaldo Bustamante/EL PILÓN