Escribo esta columna hoy domingo 27 de octubre, después de haber conocido los resultados electorales. La Registraduría se anotó un nuevo éxito y en forma rápida, cristalina y oportuna; nos dio a conocer los resultados finales y el nombre del nuevo Gobernador Luis Alberto Monsalvo y Mello Castro para la alcaldía de Valledupar.
En el Departamento del Cesar hubo aparentemente una calma y nuestra Valledupar querida se movilizó en forma adornada al cumplir con su deber ciudadano. A las 4 de la tarde terminó la jornada electoral.
En fin, el debate electoral se desarrolló en forma respetuosa, y los cesarenses y vallenatos acudieron a las urnas a expresar sus deseos.
No me sorprendió la votación de Luis Alberto Monsalvo, es el premio a su trabajo y dedicación. Fue una decisión correcta del pueblo. Luis Alberto logró conectarse con el entusiasmo y estado de ánimo de un alto porcentaje de cesarenses y vallenatos, en una campaña fresca, moderna y optimista. Persona de carácter, de conocimiento y de experiencia para el desempeño de las más importantes y complejas funciones públicas. Tendrá un gobierno cercano a la gente rodeados de un marco de esperanza.
En cuanto a Mello tiene experiencia en la política, exconcejal y exdiputado. Fue quien nos dio la sorpresa, superando por escasa margen al candidato más ocropinado Ernesto Orozco.
Al candidato Ernesto Orozco, felicitarlo, fue un perdedor victorioso. Hizo una campaña sana, contra todas las adversidades, ataques y calumnias. Con el resultado que obtuvo se convierte en un dirigente clave dentro de nuestra sociedad y respetó las reglas de juego todo el tiempo, un punto que debe jugar a su favor en el futuro.
Desde el primero de enero entrarán en ejercicio de su cargo los nuevos mandatarios seccionales elegidos: Gobernador, Alcalde, diputados, concejales y ediles de las juntas administradoras locales.
Para cumplir a cabalidad con las obligaciones, tareas y responsabilidades que les señala la Constitución y la Ley, así como aquellas que les han sido conferida por la voluntad ciudadana que con el ejercicio democrático los eligió como su representante, es fundamental que los nuevos mandatarios integren cuadros de sobresalientes características.
En efecto, a la hora de integrar los gabinetes y designar a quienes habían de hacer equipo con los nuevos gobernantes, es preciso seleccionar a los profesionales más idóneos con las mejores hojas de vida; más probos. Tales criterios deben prevalecer sobre los afanes y las expresiones políticas que en múltiples oportunidades terminan por imponer nombres que enturbian las gestiones públicas.
Los nuevos gobernantes Luis Alberto y Mello deben convocar a la unidad, representar sin medidas ni rencores a la mayor cantidad de sectores y tendencias. Otra de las responsabilidades de los nuevos mandatarios es la de no hacer concesiones a la corrupción.
Confiamos en la capacidad de gestión de los nuevos mandatarios en su prudencia y madurez para aprender de las lecciones del pasado, mirar al futuro con optimismo y conducir las comunidades por la vía virtuosa que eleven los niveles de bienestar colectivo tanto en el departamento como en el municipio.
Sólo me resta desearle éxitos al nuevo gobernador Luis Alberto y al alcalde Mello Castro y que trabajen unidos en bien del Cesar y Valledupar.