Sus ojos reflejan la ambición de ser grande: no importa el drama que lo envuelve, su ilusión es más fuerte que ver su inmueble destruido por culpa de la naturaleza.
Mientras entrena para disputar el título latino welter (145 kilogramos), el próximo 7 de agosto en Bogotá ante el venezolano Patris López, el boxeador vallenato Janner ‘Arenita’ González no deja de pensar en la tragedia que vivió hace unas semanas cuando un huracán acabó con su casa de bahareque construida en la invasión Brisas de La Popa.
Lo que levantó con el sudor de su frente, o mejor a puño limpio fue devorado por la fuerza de las brisas que no tuvieron compasión con lo que encontró a su paso.
“Ese día me tumbó lo que había construido, el techo y las paredes sufrieron muchos daños, afortunadamente poco a poco me he ido levantando de esta tragedia, lo importante es no perder la calma y concentrarme en lo que viene, por ahora vivo en la casa de mis padres en el barrio Eneal”, dijo el pegador de 27 años.
Por ahora, Janner ‘Arenita’ González entrena en Valledupar bajo las órdenes del ‘esquinero’ Víctor Díaz; por la mañana realiza trabajos físicos y por la tarde hace énfasis en labores técnicas y tácticas.
El vallenato y el venezolano se verán las caras en el coliseo El Salitre, en el marco de una cartelera que pondrá en acción una baraja de combates de primer nivel.
“Es un boxeador experimentado, fue selección Venezuela y estuvo en los Juegos Olímpicos de Beijing, yo me estoy preparando para ganarle porque sueño con una oportunidad mundialista”, reconoció el boxeador que en el campo aficionado fue campeón nacional el más de cuatro oportunidades.
Con 18 peleas profesionales, 15 de ellas ganadas por nocaut y tres por decisión, Janner González no baja la guardia en su ruta hacia una oportunidad mundialista; su carrera la desarrolla en Cartagena, sin embargo, nunca olvida a su natal Valledupar para combinar el proceso en el que sueña coronarse campeón mundial.
Su última pelea fue el pasado 19 de mayo ante el venezolano Marco Antonio Avendaño, al que derrotó por la vía rápida en el cuarto asalto.
Nibaldo Bustamante/ EL PILÓN