Y regresó el eclipse el lunes y nadie le paró bolas. En 1998 Valledupar fue elegida por la naturaleza para ver el eclipse fue una propaganda que el alcalde de la época mostró en los medios como su mejor obra, el fenómeno ocurrió el 20 de febrero de 1998, desde las 12.59.28 hasta la 1:03.07, en total fueron 3 min. 39 segundos que la administración de le época celebró con una bulla grande que casi no nos dejó ver el fenómeno. No recuerdo tampoco quien era el alcalde ni estoy interesado en recordarlo.
El del lunes festivo anterior, pasó desapercibido, sin pena ni gloria, no hubo bulla administrativa, pues la ciudad anda en otro tono, naranja para ser más claro. En una ciudad de poetas y cantores, donde Ovidio Granados canta su mejor canción, Rayito de luna ( Yo quisiera ser un rayito de luna, para entrar hasta tu lecho donde tu duermes…) y Gustavo Gutiérrez se inspiró en paisaje de sol ( aquel paisaje nació sobre una tarde de sol, allí el destino marcó el sendero de mi canción) Pero de nada sirve si el pero caza la presa y viene el dueño y se la quita.
Las palabras tienen poder y lirismos, la palabra cataclismo por ejemplo, la conocimos por el poeta Rosendo Romero (Romanza) y hecatombe la escuchamos por Uribe, siendo que son sinónimos, pero viniendo de quien viene adquirimos el vicio de la traducción mental. Una para soñar, otra para llorar.
En este país vivimos llorando hace 50 años, los mismo que cumplirá el hombre de haber ido a la luna, pero somos uno de los países más felices del mundo, dicen los tablero internacionales de prensa rosa. O naranja, da igual. Hace igualmente 25 años asesinaron por cosas del futbol a un buen muchacho de la selección Colombia, todo indica que v por errar un penalti, por el mismo caso amenazan a Tesillo, cuyo apellido sirve para que los verseadores en “pie forzao” rimen versos, porque Tesillo pega casi con todo. Palillo, trapillo, culillo, cursillo, caudillo, tufillo, en fin.
Si no le paramos bolas al eclipse de sol, menos “Turcotón” el domingo con largo puente, algo que con los aportes de sus colegas artistas en magníficas condiciones económicas y sociales pueden hacer, y el mismo gobierno que invierte millones en escuelas amigas y festivales como Fides, por ejemplo ndo ni compañeros de escuelas de mandatarios y congresistas de moda. Es otra cosa, es otra historia, triste por supuesto. La filantropía amiga que hacia la Cacica Consuelo Araujo cuando amigos presentaban situaciones parecidas son historias, y vale recordar al Don Jorge Dangond con la brigada costeña para la casa del maestro Leandro Díaz.
Vivimos un fenómeno grande de olvidos, hemos perdido valores, incluso nos hemos vuelto indolentes. No hay una hora tranquila en tu casa cuando no toquen al menos 5 personas pidiendo plata y comida. Es una tragedia, ni para que mencionar las calles y semáforos donde la mano extendida es la foto real, nos recuerda, guardando proporciones la publicidad de Nestlé y sus pajaritos con pico abierto esperando, hoy somos una gran pajarería de hambrientos. No sé si tema inspire a los avistadores de aves que vienen al Valle, las mismas noticias vienen de Riohacha donde hacen el “festival de la pajará”.
La Guajira, El Chocó, y Valledupar ocupan hoy lugares de desempleo a nivel nacional, nadie tiene una respuesta inmediata para esta tragedia, pero en tiempos electoreros como los actuales hay magos en cada esquina, y aquí nuestro lugar sagrado popular es 5 Esquinas, ojalá no ocurra como en la novela del mismo nombre de Vargas Llosa, es mejor que Chabela se quede con Marisa haciendo lo que hicieron y que Quique salga a la cervecería de la ciudad vecina. Hay novelas que parecen nuestras, pero el eclipse no deja verlas, o leerlas. Chao. @edgardomendozag.