El año nuevo, como es costumbre, comienza con las alzas en combustibles cuyo efecto colateral hace que otros productos de la canasta familiar aumenten. No es nada nuevo en la economía colombiana, sin embargo hace que el ciudadano sienta considerablemente el impacto en su bolsillo, especialmente porque pasa de una época de gastos por las fiestas de Navidad, año nuevo y vacaciones, a los gastos escolares.
Uno de los aumentos que EL PILÓN quiere resaltar, más como un servicio a la comunidad, es el que hicieron a las multas de tránsito, que aumentaron en 4,5 por ciento –lo mismo que el salario mínimo. Esto significa que las sanciones pecuniarias por infracciones de tránsito aumentan considerablemente, que sumadas a las sanciones penales y administrativas de la Ley 1696 del 19 de diciembre de 2013 (Ley Antiborrachos), se convierten en una amenaza representativa para la economía familiar si no se acatan las normas de tránsito. Este es un gasto fácil de evitar sí se cumple la ley.
Las multas de tránsito que las autoridades de tránsito imponen desde este primero de enero por infracciones a las normas fijadas en la Ley 769 de 2002, tomaron a muchos ciudadanos por sorpresa. Solamente el hecho de volarse un semáforo en rojo le costará al conductor o propietario del vehículo $616.000, cifra igual si se conduce sin los seguros exigidos por la ley, si se conduce sobre las aceras, plazas, vías peatonales, así como conducir un vehículo sin luces o sin los dispositivos luminosos de posición, direccionales o de freno, o con alguna de ellas dañada, entre otras.
Pero la más alta sanción, por $924.000, la imponen por proveer combustible de servicio público con pasajeros a bordo, negarse a prestar el servicio público sin causa justificada, siempre que dicha negativa cause alteración del orden público, transportar en el mismo vehículo y al mismo tiempo personas y sustancias peligrosas como explosivos, tóxicos, radioactivos, combustibles no autorizados. Existen otras multas menores que oscilan entre los $308.000, $164.500, $82.100 y $20.500, que corresponden a salarios mínimos legales diarios legales vigentes.
A todas estas multas le aplican un descuento previa asistencia al curso pedagógico, que se encuentra estipulado en un 50 por ciento si se hace entre el primero y el quinto día hábil, y del 75 por ciento si va del sexto hasta el vigésimo día.
Es oportuno que la Secretaría de Tránsito y Transporte de Valledupar realice campañas pedagógicas sobre las infracciones que se generan por el incumplimiento de las normas de tránsito, tanto de carros como de motocicletas y bicicletas. Seguramente la movilidad mejorará, pues la mayor congestión en las calles céntricas y puntos críticos de la ciudad se genera por el desconocimiento y por ende el incumplimiento de las normas de tránsito. Una ciudadanía informada y educada puede ser la solución al caos vehicular.