Un brote de tuberculosis en la Permanente Central de la Policía de Valledupar encendió las alarmas entre las autoridades. Tras el diagnóstico de 10 reclusos con la enfermedad se tomó la urgente decisión de trasladarlos a la cárcel Judicial para evitar la propagación del contagio y proteger la salud de los demás internos y personal policial.
Uniformados de la Policía Metropolitana de Valledupar y la directora de la cárcel Judicial, junto con otros miembros del Inpec, sostuvieron una reunión de urgencia con la Personería municipal el jueves 4 de julio a fin de atender la situación de salud pública.
El traslado de los reclusos enfermos fue realizado este viernes 5 de julio en virtud de un convenio interno administrativo que suscribió la Alcaldía de Valledupar con la cárcel Judicial el cual estableció dicho traslado de 200 privados de la libertad. 190 más serán trasladados el próximo 17 de julio.
A raíz del convenio, la Alcaldía de Valledupar deberá brindar a la cárcel Judicial elementos como vehículos, kit de aseo, y pagos para sobresueldo de empleados y demás. El acuerdo únicamente acoge a internos que sean del municipio, no establece o acepta reclusos de otros lugares del Cesar.
Los privados de la libertad afectados tendrán un tratamiento especial y aislamiento que adelantará la secretaría de Salud municipal.
Esta decisión fue rechazada por el dragoneante José Ramírez Pedraza, quien hace parte del sindicato del Inpec, el cual asegura que desconocían que dicha reunión se ejecutó y con esta determinación se pone en riesgo los internos y personal de la Judicial.