San Diego es uno de los municipios más bonitos del Cesar, sus calles transportan a los visitantes a una época antigua y su gente es buena, sin embargo, las cosas buenas de dicho lugar hacen contraste con una situación que tienen que vivir quienes residen ahí y es el hecho de no contar con un acueducto que les proporcione agua potable.
En las casas, el agua llega a cuenta gotas, la presión es baja y el líquido no puede ser consumido, hay quienes cuentan con la solvencia económica para llevar agua desde la capital del Cesar otros se ven en la necesidad de hervirlo para poder consumirlo.
Muchas personas en San Diego deben consumir agua que llevan desde Valledupar.
Esta problemática no es nueva, pues desde hace años esto se ha convertido en la “piedra en el zapato” de los mandatarios que han pasado por la Alcaldía de San Diego, sin poder hacer mucho para solucionarlo.
Lavar la ropa, hacer oficios, cocinar, bañarse, entre otras, se convierten en unas actividades titánicas diarias para los sandieganos.
El mandatario de San Diego, Humberto Benavides González expresó que el municipio se surte con el agua que corre del río Chiriaimo y que este no cuenta con una corriente muy fuerte, pero que pese a eso se hace lo posible desde la administración para poder proveer del preciado líquido a toda la comunidad.
“El principal problema en San Diego es el del acueducto, eso es algo que se ha venido presentando desde hace muchos años, yo creo que la problemática radica en la falta de continuidad de los planes de gobierno de los alcaldes y que el servicio está sectorizado, pero eso es lo que yo creo, porque la verdad en este momento no se sabe cuál es el problema principal debajo de las calles, lo que si hay que decir es que el 60% de las tuberías del acueducto tienen más de 40 años y son en cemento”, explicó Benavides González.
Pese a que el alcalde manifestó que en algún momento fueron ayudados por Aguas del Cesar, dijo que solo fue por un periodo de un año.
Entre las proyecciones se tiene la elaboración de un estudio que permitirá obtener conocimiento sobre el verdadero problema del acueducto de San Diego, lo cual encaminaría las decisiones y las estrategias que se implementarían para solucionar esta problemática.
“El diagnóstico lo vamos a hacer con recursos de regalías de la vigencia de 2015, la idea es empezar con eso a finales del año para que los primeros meses del próximo tengamos una respuesta que nos dé luces sobre lo que de verdad se necesita hacer, ahí procederemos a llevarlos al Ministerio de Vivienda para poder conseguir un apoyo de esa cartera nacional y tener recursos para mitigar esta situación”, enfatizó el mandatario de los sandieganos.
Por Redacción EL PILÓN