La ‘mala hora de la educación’ no termina, ahora el problema es la falta de aseadoras y vigilantes para las instituciones educativas tanto de la zona urbana como rural.
En un debate realizado en el Concejo de Valledupar, los corporados revelaron la situación que viven algunas instituciones educativas que se quedaron sin vigilantes y aseadoras.
Alex Pana, concejal de Valledupar, explicó que con las aseadoras y vigilantes contratados por el Municipio no se van a resolver los problemas que tienen las instituciones educativas de tener una buena educación “ya que hay alumnos, padres de familia y los mismos profesores que se dedican a hacer el aseo y hay muchos hurtos que se han ocasionado por la falta de vigilante, el caso de Guaymaral, el Casimiro Maestre y muchos casos”.
Según explicó el Concejal, el secretario de Educación Municipal, Asdrúbal Rocha durante el debate, se comprometió a hacer la contratación de la vigilancia hasta diciembre, “pero nos quedó un sinsabor, porque hasta agosto se va a realizar lo de las aseadoras. Todos los años a final de año, precisamente en agosto, nos quedamos sin aseadoras y aquí le vamos hacer al Secretario el seguimiento pertinente”.
Para el corporado, no es posible que un niño que desde que llegue al colegio le coja fobia al mismo, porque le toca hacer el aseo.
Pana dijo además que, faltan entre 60 a 70 aseadoras, mientras que solo fueron contratados 64 vigilantes para todas las instituciones educativas existentes.
“La cuestión es de presupuesto, se ha gastado en otras cosas y no se ha invertido en lo que de verdad debe invertir que es en la educación para garantizarle a nuestros niños una educación integral”, agregó.
Entre tanto, el concejal Yesit Triana explicó que lo que buscan es que haya una mejor distribución de los recursos para que haya equidad en la prestación en los servicios de aseo y vigilancia tanto en la zona urbana como rural.
“Contrataron un número de celadores y lo distribuyeron en 15 instituciones educativas y en algunas instituciones rurales, en el caso del colegio Luis Rodríguez Valera que tiene cuatro subsedes, la del corregimiento de Guaymaral, Los Venados y Caracolí allí no contrataron celaduría, solo tres para la institución central que queda en Los Venados, entonces es la solicitud que le estamos haciendo al Secretario de Educación para que exista equidad y derecho a la igualdad”, afirmó Triana.
Para el concejal, la falta de vigilantes trae como consecuencia los robos permanentes, “casos como el que ha venido sucediendo en Guaymaral donde de la institución educativa se hurtaron 29 computadores, igualmente tres acordeones, aquí no es tanto el valor económico, sino por la prestación del servicio a 370 estudiantes que reciben clases, igualmente están el resto de instituciones que tienen derecho a que haya aseo digno”.
El concejal Ricardo López Valera por su parte, afirmó que no hay igualdad entre los colegios, porque algunos les correspondieron entre dos y cinco vigilantes, mientras que a otros no le asignaron.
El secretario de Educación, Asdrúbal Rocha se defendió y dijo que en el caso de Valledupar todos quedaron con vigilancia y aseadora, lo que pasa es que en algunos casos no es suficiente.
Explicó que, el año pasado radicaron un proyecto por 2.300 millones de pesos en el que tuvieron en cuenta las instituciones con mayores problemas de seguridad, debido a que son blancos de los ladrones que hurtan los computadores.
“En ese proyecto le dimos mayor importancia a los celadores, no quiere decir esto que no sean importantes las aseadoras”, dijo Rocha.
El Secretario explicó que hay casi 74 celadores sin armas, pero esto no significa que los robos se vayan a acabar y puso como ejemplo lo sucedido la semana pasada en el corregimiento de La Mina, en donde los ladrones entraron al colegio, amordazaron al vigilante y paso seguido procedieron a llevarse 29 computadores que luego fueron recuperados en Valledupar.
Explicó que en el caso del colegio Luis Rodríguez Valera, le asignaron cuatro celadores y el rector debe distribuirlos en las instituciones anexas.
Debate a la salud
A partir de las 8:00 de la mañana, la Asamblea del Cesar debatirá la situación del hospital del municipio de Chimichagua.
La iniciativa es de los diputados Omar Benjumena, Luz Elena Salazar y Carlos Daniel Rocha.
Benjumea dijo que este centro asistencial se encuentra en la peor crisis financiera en la calificación que le da el Ministerio de Salud, que le recomendó fusionarse con el de Astrea.
“Ese hospital necesita la ayuda del Departamento para poder seguir adelante, Chimichagua es considerado un municipio en la pobreza absoluta y el hospital está al borde de un cierre, entonces lo que queremos es hacerle un llamado al Departamento, al gobierno nacional para que el Ministerio o condone la deuda o le dé recursos para salir adelante”, explicó Benjumea.
El centro asistencial tiene una deuda de cuatro mil millones de pesos, al parecer, por desgreño administrativo.
Por Sandra Santiago B.
sandra.santiago@elpilon.com.co