Cuando ya ha corrido mucha agua debajo de un puente llamado 2024 y como es lógico, sentimientos, personas y momentos, se atesoran en los cristales del tiempo y el recuerdo, me adentro en ellos precisamente para resaltar a mi casa editorial, EL PILÓN.
Pero al momento de agradecer tantas enseñanzas y cariño, la palabra gratitud se queda corta en el diccionario de la vida y mucho más cuando trato de explicar 30 años inefables de grandeza, informando y formando; escribiendo la historia de una tierra que vibra a ritmo de acordeón y convirtiéndose en la principal escuela de periodismo en la región.
Cumplir 30 años no es un camino fácil de recorrer, es sinónimo de crecer, madurar, estar preparado para afrontar retos y sobre todo enarbolar las banderas de la independencia. Y lo que inició como un sueño y forjó Dickson Quiroz Torres, en la actualidad, Juan Carlos Quintero, su director, lo ha hecho brillar con luz propia, sin escatimar ningún esfuerzo y manteniendo el legado de la prensa escrita local en el corazón de los vallenatos, porque las formas cambian, pero el espíritu permanece intacto.
Así mismo, cuando se deshojan las vivencias de mil historias, me atrevo afirmar que Juan Carlos Quintero no solo interpreta el sentimiento de una Valledupar con su música, cultura y costumbres sino también el de una ciudad que no puede coexistir sin un medio de comunicación impreso, sin el nuestro, sin EL PILÓN.
Por ello, quizás ha batallado en medio de la crisis y de la migración digital que amenaza la tinta y el papel, pero ha sabido reinventarse con el apoyo de la gerente Clara Inés Araújo, iniciando los cimientos de un gran aporte cultural para nuestra región, gracias a la creación de muchos proyectos, como la Feria del Libro de Valledupar, FELVA.
Pero la historia de EL PILÓN también ha sido construida por grandes periodistas que han dejado huellas en esta casa editorial y al recordarlos, es inevitable no hablar de un gran maestro como Guzmán Quintero Torres, periodista intachable y amante de su profesión y que tristemente la violencia cegó su vida, porque en estos 30 años, El Pilón también ha llorado, como muchas veces lo hago, al recordar las palabras de Guzmán a un niño de 13 años, ilusionado con ser caricaturista: “Vas a dibujar la realidad del mundo”.
De igual forma, dentro de la retina de la historia de EL PILÓN, también estarán en su versada lista de periodistas, los nombres de: Gustavo Cuello, Ana María Ferrer, José Urbano Céspedes, Sergio López, Agustín Bustamante, Yanitza Fontalvo, Óscar Martínez, Galo Bravo (QEPD), Yimis Nuñez, Martín Mendoza, Iván Ochoa, Abdel Martínez, José Alejandro Martínez y otros tantos que han escrito y siguen escribiendo con letras esplendorosas, las memorias del medio impreso de los vallenatos por esencia.
Además, columnistas, colaboradores y personal administrativo, también han hecho parte con su compromiso constante de las luchas y esfuerzos que hoy hacen grande a EL PILÓN.
Por lo pronto, seguiré en estos últimos momentos de este 2024, aplaudiendo aún los 30 años de El Pilón, pero sobre todo celebrando con gratitud, porque esto implica reconocer y agradecer cada experiencia y cada desafío en esta casa editorial, que ha sido parte de mi camino, dibujando la senda sobre el papel de mi vida, con trazos de oportunidades que me han permitido destacarme como su caricaturista, obteniendo muchos reconocimientos, que juntos a mi agradecimiento y amor perenne, son mi mayor regalo, y porque también, 30 años no se cumplen todos los días.
Por: Deivi Safadi Pupo.