Un total de mil 32 kilos de envase en desuso de plaguicidas fueron recolectados por la Secretaría de Salud Departamental en el marco del plan de desarrollo para el cuidado del medio ambiente. La actividad de recolección se llevó a cabo en el corregimiento de San José de Oriente, municipio de La Paz, en Valledupar y en inmediaciones del corregimiento de Badillo.
La actividad de recolección de embases en desuso se hizo luego de una campaña de sensibilización de parte de la entidad de salud en la que les explicó a los propietarios de fincas, lotes y trabajadores en general sobre la importancia del proceso de triple lavado de los recipientes ante de entregarlos a los funcionarios de Salud Ambiental de la Secretaría Departamental.
La disposición de estos recipientes se hizo con el apoyo logístico de la Corporación Campo Limpio quienes acompañaron la recolección de 311 kilos de embases en el corregimiento de San José de Oriente, 81 kilos de envases de plaguicida en el corregimiento de Badillo y 640 kilos correspondiente a los depósitos almacenados en la antigua sede de Malaria.
Estos recipientes fueron trasladados al centro de acopio en las instalaciones de la Federación Nacional de Arroceros (FEDEARROZ), para luego ser trasladados por la Corporación Campo Limpio a su destino final, para ser incinerados en hornos especializados.
Ésta campaña de recolección de envases tóxicos será realizada por la Secretaría de Salud Departamental en coordinación con Campo Limpio en el transcurso del año y con la participación de otros municipios y corregimientos; a su vez realizarán apertura de un nuevo centro de acopio.
Consumo responsable de plaguicidas
Según la revista CroplifeLatinAmérica la producción de envases contaminados con plaguicidas en Colombia asciende a 5 millones 820 mil kilos al año, por esta razón es pertinente que cada actor tenga en cuenta de manera estricta los protocolos para su disposición final, dándole cumplimiento a todas las normas emitidas por los organismo tanto ambientales como de salud.
Los embases agroquímicos después de su uso, representan un peligro para el medio ambiente y la salud de la comunidad, cuando no son manejados de manera adecuada y responsable por lo cual es importante tener en cuenta que no se pueden quemar porque generan gases tóxicos, no se pueden enterrar porque contaminan el suelo y las fuentes de agua y no se pueden disponer para otros usos porque tiene riesgo de intoxicación.
“Según la revista CroplifeLatin América la producción de envases contaminados con plaguicidas en Colombia asciende a 5 millones 820 mil kilos al año”.