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Víctima del matoneo y las demoras de la salud

Jazmín Bautista Patiño aseguró que en el colegio donde su hijo estudia son frecuentes los casos de matoneo, pero las directivas docentes no toman medidas drásticas. Foto Andrés Llamas Nova / El Pilón

Jazmín Bautista Patiño busca ayuda para poder trasladar a su hijo hasta otra ciudad del país para que un especialista lo atienda, porque tiene temor de que el niño de 10 años pierda un ojo, a causa de una pedrada que otro compañero le propinó mientras se encontraba en la Institución Educativa Milciades Cantillo Costa.

El 25 de julio, en un pasillo del colegio, dos niños de 13 años lanzaron piedras y una de éstas le impactó en el rostro al pequeño de 10 años, y desde ese día Jazmín espera que tanto la institución educativa, las madres de los niños agresores o la Defensoría del Pueblo, le ayuden con los gastos médicos puesto que la EPS que tiene, ha manifestado demoras para la remisión a los especialistas.

 “El año pasado dos niños lo golpearon y le bajaron los pantalones, dijeron que era jugando. Citaron a los padres pero los niños continuaron igual, siguieron en clases como si nada. Ahora con este caso no quiero dejar las cosas así porque el niño tiene mal el ojo”, dijo Jazmín.

La madre del menor, desde su vivienda en Villa Haidith, exige que las autoridades tomen medidas en la escuela para que ese tipo de cosas no suceda; a menudo los niños son víctimas de matoneo en la Institución Educativa Milciades Cantillo y otras de la red de escuelas públicas, dijo la denunciante.

“Me atendieron en Sanidad Militar y remitieron al niño a un oftalmólogo, al día siguiente el especialista lo trasladó para que le hicieran una ecografía de retina. Le eche unas gotas que le formularon pero al ver que no le estaban cayendo bien, pedí una remisión al batallón y dijeron que en 10 días tendría que sacar una cita en Barranquilla, y que no había presupuesto”, agregó Jazmín.

El niño de 10 años, estudiante de cuarto grado de primaria en la Institución Educativa Milciades Cantillo Costa, ha sido en dos oportunidades víctima del matoneo en las aulas de clases; ahora lucha en contra de las demoras de la salud y espera que alguien le ayude con los gastos de un médico particular que los está atendiendo en Bucaramanga, puesto que la visión del ojo derecho del niño es casi nula.

Por Andrés Llamas Nova 

andres.llamas@elpilon.com.co

 

Categories: Judicial
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