Varios menores de edad resultaron víctimas de la violencia de adultos en hechos aislados presentados en distintas poblaciones del Cesar.
El primero de estos casos, ocurrió a eso de las 5:30 de la tarde del domingo anterior, en el corregimiento de Rincón Hondo, cuando dos hermanos de 14 y 7 años, se orillaron en la carretera para arreglar la llanta delantera de la carretilla que llevaban cuando fueron sorprendidos por un vehículo particular que, según uno de los allegados a los pequeños afectados, era conducido por un hombre en estado de embriaguez.
En el percance vial, el vehículo no solo arrolló a Bayron Alexander Reina Valencia, de 14 años, y a su hermanito de 7, también se llevó a otro pequeño, de seis años, que pasaba casualmente por el lugar.
Los menores recibieron múltiples contusiones que obligaron a los testigos del hecho a trasladarlos al hospital de Chiriguaná, desde donde fue necesario remitir al mayor de ellos hasta el hospital Rosario Pumarejo de Valledupar, debido a los traumas que sufrieron en la cabeza y de los cuales se recuperan satisfactoriamente, luego de varias intervenciones quirúrgicas, según el último parte médico conocido.
Sobre el conductor responsable, se conoció que huyó del lugar, pero fue detenido en el municipio de La Jagua de Ibirico y trasladado por los agentes de Policía a la Estación de Codazzi.
En San Diego
Con trauma severo en la cabeza y fractura en el brazo izquierdo, ingresó al Hospital Rosario Pumarejo, una pequeña de seis meses de nacida.
Aunque aún es un misterio como se presentaron los hechos, la mamá de la pequeña, Diana Rosado, manifestó que responsabiliza a su compañero sentimental, Fernando Sarabia, de 35 años, a quien le dejó la niña mientras viajó hasta Valledupar a realizar una diligencia.
“Voy a denunciarlo porque, según él no pasó nada y luego dijo que se había caído de la cama pero no le creo”, afirmó la mujer.