Las autoridades en el Cesar asestaron duros golpes a las estructuras criminales dedicadas al narcotráfico de alucinógenos en el departamento.
En las últimas horas tres hombres fueron capturados y se erradicó una hectárea de cultivo de marihuana que mensualmente producía 60 kilos del alucinógeno.
Dos de los arrestos se materializaron en Pueblo Bello, (Cesar), uno de ellos fue en una vivienda ubicada en la vereda Costa Rica donde el Gaula Militar sorprendió en flagrancia con 4,53 kilos de marihuana a Jair Alfonso Contreras, de 24 años.
Posteriormente el CTI y el Gaula del Ejército se desplazaron hasta la finca Ana Yulieth en la vereda Cuesta Plata, jurisdicción de Pueblo Bello, donde fue aprehendido Alfonso José Ramos, de 66 años, señalado por la comunidad del sector de vender sustancias psicoactivas a jóvenes y niños de la población.
A Alfonso Ramos las autoridades le hallaron oculto dentro de su habitación, tres kilos de marihuana listos para su comercialización.
Continuando con los operativos contra el microtráfico, servidores de la Fiscalía Local de Codazzi se desplazaron hacia la invasión Brisas de La Popa en Valledupar, donde la red de cooperantes denunció la comercialización de sustancias alucinógenas al interior de una vivienda.
De esta manera fue detenido Félix Enrique Miranda Maestre y presentado ante un juez de Control de Garantías donde la Fiscalía lo acusó como presunto responsable del delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
Por otro lado, Jair Alfonso Contreras y Alfonso José Ramos, fueron dejados a disposición de las fiscalías 30 y 25 seccional antinarcóticos de Valledupar que los acusó ante un Juez de Control de Garantías como presuntos responsables del delito de tráfico, fabricación o porte de estupefacientes.
Los capturados fueron privados de la libertad en un centro carcelario en Valledupar.
Cultivo de marihuana
Tropas del Batallón de Ingenieros número 10, ‘Manuel Murillo González’, localizó y erradicó una hectárea de cultivo de marihuana en el sector conocido como El Tinajón, inmediaciones del corregimiento de Caracolí, jurisdicción de Valledupar.
El Ejército informó que la gran extensión de cultivo del alucinógeno generaba para los grupos armados 60 kilos de marihuana al mes equivalentes a 18 millones de pesos.