La riña entre varios indígenas en un establecimiento público del corregimiento de la Mina, jurisdicción de Valledupar, cobró la vida de Rosiliano Montero Pacheco, de 25 años, quien tras recibir una puñalada murió cuando era trasladado a un centro asistencial.
El hecho se presentó el domingo a las 8:30 de la noche, en la cantina ‘El Resbalamono’, donde Montero Pacheco departía con un grupo de amigos y fue atacado por un hombre que – al parecer- estaba el alto grado de embriaguez.
Según familiares del Kankuamo muerto, la brutal agresión se produjo por una deuda de 150 mil pesos, que el agresor tiene con un hermano de la víctima. “Al parecer pensó que Rosiliano le iba a reclamar la plata y lo atacó sin más allá ni más acá”, expresó Rafael Ramos Pacheco, familiar del indígena.
El joven inicialmente fue atendido en el puesto de salud de la Mina, pero ante la gravedad de la herida y la falta de médicos tuvo que ser remitido al hospital del corregimiento de Patillal, al norte de Valledupar, donde llegó desangrado.
Investigadores de la SIJIN de la Policía hicieron el levantamiento del cadáver que fue trasladado a la morgue de Medicina Legal y Ciencias Forenses de la capital cesarense.
El presunto homicida fue capturado por soldados que patrullan la zona, quienes lo dejaron a disposición de la Fiscalía para ser judicializado por el delito de homicidio.
Denuncia
Mildreth Montero, líder de la comunidad de La Mina, afirmó que la muerte del joven Rosiliano Montero, en su opinión, se produjo por falta de atención oportuna, ya que en el pueblo no cuentan con un médico que atienda permanentemente.
“En la mina tenemos un puesto de salud pero no hay médico, solo atiende una enfermera, por lo que el muchacho no recibió la atención adecuada, pudo habérsele salvado la vida”, afirmó la líder comunitaria.