El comandante de la Décima Brigada Blindada del Ejército, brigadier general Adelmo Fajardo Hernández tiene claro que la lucha es contra las organizaciones al margen de la ley y garantizar la seguridad en los departamentos del Cesar y La Guajira, en medio de sus múltiples ocupaciones abrió un espacio para hablar de estos temas en entrevistas con El Pilón.
EL PILÓN: Tema de actualidad son los diálogos de paz del gobierno con las Farc, ¿cuáles son las directrices que ha recibido del mando central para afrontar todo este conflicto que se presenta?
Adelmo Fajardo. Tenemos un marco de plan de campaña llamada Espada de Honor, que entre sus objetivos está el de proteger la infraestructura económica y la población civil, en ese trabajo de protección están dedicado 80 por ciento de nuestros hombres, también tenemos una misión importante la de actuar sobre toda la reducción al margen de la ley como son las Farc, el Eln, las bandas criminales al servicio del narcotráfico, la delincuencia común, extorsión, el secuestro. Dentro de nuestras líneas está muy pero muy importante el trabajo ante este flagelo”.
EP: ¿Qué tan fuerte se encuentra la estructura guerrillera en el Cesar y La Guajira?
AF: En estos departamentos las estructuras guerrilleras no son muy fuerte, pero tiene un apoyo de algunas redes del terrorismo: las Bacrim, milicias y eso es lo que las hace peligrosas, cuando un bandido se esconde en la sombra de un buen hombre para delinquir, por ejemplo contratan personas para trabajar en una finca y entre estos se infiltra un bandido de las Farc y por intermedio de ellos es que hacen el daño”.
EP. ¿Existen en el Cesar alianzas estratégicas entre grupos guerrilleros y Bacrim?
AF: En todas las jurisdicciones se da, porque los intereses son comunes, los delincuentes siempre mueven narcotráfico, mueven combustible de contrabando, entonces todos tienen que trabajar unos con otros en algún momento. Quien siembra la coca tiene que moverla, alguien se la comprará, entonces la cadena del narcotráfico en su base, generalmente las Farc delinque en ese punto, pero ya en el transporte, la transformación, las cocinas, lo hacen las bandas criminales al servicio del narcotráfico.
EP: ¿Qué cree que tratan de mostrar los grupos guerrilleros con los atentados recientes como es el caso de gasoducto en La Guajira y los vehículos incinerados?
A.F: Cuando se incineró un vehículo el año pasado en la vía entre San Diego y Codazzi, se hace un atentado contra la población civil, contra los recursos, la paz ciudadana, eso no da ninguna muestra de capacidad militar, eso da muestra de debilidad, que solamente mediante acciones terroristas pueden mostrar fortaleza, entonces la lectura es que quieren mostrar una fortaleza que no tienen.
EP: Usted ha tenido oportunidad de estar en diferentes unidades militares del país. ¿Qué comparación hace entre estos lugares con el departamento del Cesar?
AF: Las circunstancias de tiempo, modo y lugar en cada región son diferentes, los intereses son diferentes y la forma de delinquir son diferentes. Lo hacen de diferentes formas por el apoyo de la población civil, por las características del terreno, por la economía y por las formas de delincuencia que hay en el entorno. Yo he trabajado en el sector de Caquetá y en el Valle, en Antioquia fui comandante de la Décimo Cuarta Brigada, los delitos y la forma de delinquir son diferentes, igual aquí en el Cesar y La Guajira, lo hacen aprovechándose de la población civil y de sus recursos. Tienen una particularidad y es que tienen muchas milicias al servicio de ellos, y eso es lo que a través de trabajos hemos venido reduciendo. Con las redes de apoyo al terrorismo, el año pasado capturamos a 200 bandidos en total, y seguimos trabajando.
EP: A propósito del fortalecimiento de las fuerzas militares, una tarea complicada es convencer a los jóvenes de la importancia de servirle a la patria, ¿cómo están manejando ese tema?
AF: Pues nosotros con las incorporaciones no hemos tenido problemas, acabamos de incorporan mil 288 hombres, nos demoramos un día en reunirlos, hacemos un trabajo de incorporación unos meses antes, visitamos a las familias de los soldados, visitamos el entorno y estamos escogiendo a los soldados que pueden trabajar con nosotros. Todo el mundo no puede ser soldado, portar el uniforme del Ejército de Colombia. Esa semilla de soldado la visitamos tres o cuatro meses antes, por eso entre mil hombres, escogemos uno, para que esta tropa sea efectiva en los trabajos de apoyo y seguridad en el Cesar y La Guajira.
EP: Usted llegó en noviembre al departamento del Cesar para comandar la Décima Brigada Blindada, como Coronel y ya en diciembre ascendió a Brigadier General, ¿cómo se refleja este ascenso en el ámbito de la seguridad en su jurisdicción?
AF: El reflejo del grado es el reflejo de la experiencia, lo más importante que puede tener la región es que tenemos experiencia, tenemos el trabajo acumulado de varias brigadas, de tres en las que he sido comandante, pero como decía, las circunstancias son diferentes en cada región, la intención es dar lo mejor a La Guajira y al Cesar. Hemos visto un gran apoyo de la comunidad, se han organizado las redes de cooperantes, hemos impulsado el trabajo de información en la comunidad y algo muy importante, estamos entrando más tropas a operar, más medios, contamos con tres helicópteros en la jurisdicción, contamos con medios importantes, soldados, buena movilidad y estamos estructurando buenos trabajos en conjuntos y coordinados con la Policía, la Fuerza Aérea para que los esfuerzos sean mejores cada día.
EP: ¿En qué están focalizando esos esfuerzos, teniendo en cuenta los sitios que frecuentemente han registrado alteraciones al orden público por parte de los grupos armados ilegales?
AF: El esfuerzo debe ser combinado. En estos sectores se diseñan unas operaciones y unos refuerzos de tropa. En esos sitios en donde no se han presentado estamos haciendo una consolidación en cuanto a obras, trabajo con la comunidad, para que no se altere el orden público en esas partes del país, sabemos que en cualquier momento se pueden alterar porque los bandidos están tratando de hacerlo con los actos terroristas. Consideramos que los ataques afectan más a la población de bajos recursos.
EP: ¿Tienen identificado a los cabecillas de estos grupos?
AF: Claro. Los cabecillas están identificados, a diario se vuelan bandidos. Conocemos al bandido Leonardo Guerra, es oriundo de La Guajira, conocemos a Sigfredo, al bandido de “Chibolo”, de Caicedo aquí del 41, y los estamos siguiendo, y por eso estamos ofreciendo desde 100 hasta 300 millones de pesos por la cabeza de cada uno de ellos, para que la gente informe, para poderlos poner a buen recaudo de la justicia. El daño que le han hecho a la comunidad, a las poblaciones es grande, hay fincas completas que han destruido, dejando en la ruina a los ganaderos, entonces estamos dedicados a trabajar en contra de estas estructuras, los conocemos. Las gobernaciones las alcaldías nos están ayudando para las recompensas. El Ministerio de Defensa tiene unas directivas de recompensas muy importantes.
El General Adelmo Fajardo, manifestó al final de esta entrevista que con un esfuerzo importante de presencia, una sensibilización a la comunidad para que denuncie, podrán capturar a los extorsionistas, relacionados con las Farc, el ELN y las Bacrim.