Cinco sujetos acusados de participar en el secuestro extorsivo del ganadero Norve Parra Benavides, de 48 años, en el corregimiento de Potrerillo, municipio de El Paso, Cesar, pidieron libertad por vencimiento de términos la mañana del martes ante el Juzgado Cuarto Penal Municipal con función de Control de Garantías de Valledupar.
Lo hicieron mediante su defensa en dos audiencias celebradas en el mismo despacho. Los primeros en pedirla fueron los procesados Luis Alberto Fonseca Vivero, Richard Alejandro Ruidíaz Castro, Juan Carlos Vanegas Daza y Jesús Alberto Vivero Mier, procesados por los delitos de extorsión agravada, extorsión en calidad de tentativa y secuestro extorsivo.
Posteriormente, también presentó la solicitud César Enrique Molina Cervantes, quien fue capturado junto con los demás en el mes de julio del 2020.
En las diligencias la defensa alegó que en el proceso se cumplió el tiempo reglamentario para dar inicio al juicio en uno de los juzgados especializado de la ciudad.
Es decir, según la petición, los implicados ya cumplieron 240 días a la espera de ser juzgados tal como lo establece la ley en el artículo 317 del Código de Procedimiento Penal en los casos donde hay varios procesados.
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No obstante, el fiscal Juan Carlos Linero se mostró en desacuerdo al considerar que ellos presuntamente conformaban una banda delincuencial y los términos no estaban vencidos.
La última palabra la tendrá el juez la tarde de este miércoles que dé a conocer su posición. Mientras tanto, los cinco procesados permanecerán privados de la libertad en el centro de reclusión al que llegaron el año pasado.
Cabe recordar que todos cayeron en un operativo que desarrolló el CTI de la Fiscalía mediante orden judicial. Según la investigación, los sujetos participaron activamente en las extorsiones que detonaron el secuestro de Nover Benavides Parra el 28 de noviembre de 2019 en su finca La Esperanza.
Aunque el secuestro en el momento no fue denunciado por los familiares por miedo, la Fiscalía realizó interceptaciones de llamadas telefónicas en las que evidenciaron las negociaciones que venían pactando los familiares de la víctima con los delincuentes.
De esas conocieron que los sujetos pedían más de 300 millones de pesos y que tras dejar en libertad al ganadero continuaron exigiendo grandes sumas de dinero.
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Una de las pretensiones precisamente iba ser pagada por la familia el 4 de febrero del año pasado con una suma de 103 millones de pesos en inmediaciones de la vía Becerril- Codazzi. No obstante, las autoridades al darse cuenta montaron un operativo en el que lamentablemente fue asesinado el soldado del Gaula Militar, Marcelo Hernández Rojas.
El uniformado fue impactado a bala en un intercambio de disparos con los delincuentes que se desplazaban en motocicleta. Aunque fue llevado a la Clínica Santa Isabel de Valledupar, minutos después pereció.
Junto a él salió lesionado su compañero Miguel Espitia Modrolejo, de un disparo en la rodilla de la pierna derecha.
De igual forma, las autoridades lograron neutralizar a Gerson David Toro León de 24 años, y dejar herido a su cómplice, Dairo Simanca Carrascal, quien fue capturado.
Este último era el parrillero de la moto que llevaba la plata producto del secuestro extorsivo y presenta anotaciones judiciales por los delitos de rebelión y hurto.