Dos de los cinco jóvenes infractores a la ley penal que se fugaron del Centro de Formación Juvenil del Cesar, CFJ, antiguo CROMI (Centro de Rehabilitación y Observación al Menor Infractor a la Ley Penal) se entregaron voluntariamente este domingo, tras ser llevados por sus familiares, argumentado que estaban arrepentidos y que estaban dispuestos a continuar con su proceso de restablecimiento de derechos y resocialización.
Entre los tres prófugos hay sindicados de homicidio; uno por el crimen del médico alergólogo, Ángel ‘El Kiry’ Maya, hermano del contralor general de la nación, Edgardo Maya Villazón, baleado cuando salía de su vivienda en el norte de Valledupar. Así mismo está huyendo el presunto autor del atentado criminal que le costó la vida al investigador del CTI de la Fiscalía, Sergio Medina Vergara, baleado en el barrio Ichagua de esta capital, cuando trató de reaccionar en un intento de atraco, el pasado 19 de agosto.
El tercer prófugo, es otro adolescente de 17 años, sindicado del delito de hurto.
Ante la evasión de los cinco jóvenes que cumplen sus medidas privativas de la libertad en el Centro de Formación Juvenil del Cesar, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar emitió un comunicado sobre el caso, precisando que la evasión ocurrió a las 2:52 de la madrugada del sábado 30 de septiembre, mientras los jóvenes se encontraban descansando y luego de la ronda de vigilancia que hicieron sobre las 2:45 a.m. los tres formadores que se encontraban de turno en el lugar, brindado acompañamiento a los jóvenes.
“Los jóvenes rompieron los barrotes de acero de una ventana de su habitación con una cegueta que habrían tomado en un descuido de los obreros que adelantaban trabajos de adecuación en el lugar.
Una vez ocurridos los hechos, el ICBF, la Policía del departamento y demás autoridades competentes activaron los protocolos de seguridad establecidos para estos casos e iniciaron la búsqueda de los tres jóvenes que aún se encuentran prófugos de la justicia, implementando un plan candado en los departamentos de Cesar, Magdalena,
La Guajira y Norte de Santander”, dicen apartes del comunicado.
COMUNICADO A LA OPINIÓN PÚBLICA
Bogotá D.C., 01 de octubre de 2017. Ante la evasión de cinco jóvenes que cumplen sus medidas privativas de la libertad en el Centro de Formación Juvenil del Cesar, el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar se permite informar que:
1. La evasión ocurrió a las 2:52 de la madrugada del sábado 30 de septiembre mientras los jóvenes se encontraban descansando y luego de la ronda de vigilancia que hicieron sobre las 2:45 a.m. los tres formadores quienes se encontraban de turno en el lugar, brindado acompañamiento a los jóvenes.
2. Los jóvenes rompieron los barrotes de acero de una ventana de su habitación con una cegueta que habrían tomado en un descuido de los obreros que adelantaban trabajos de adecuación en el lugar.
3. En la mañana de este domingo 1o. de octubre, dos de los jóvenes se presentaron nuevamente en el Centro de Formación en compañía de sus familiares, arrepentidos por lo sucedido y dispuestos a reintegrarse para continuar con su proceso de resocialización en el lugar.
4. Una vez ocurridos los hechos, el ICBF, la Policía del Departamento y demás autoridades competentes activaron los protocolos de seguridad establecidos para estos casos e iniciaron la búsqueda de los tres jóvenes que aún se encuentran profugos de la justicia, implementando un plan candado en los departamentos de Cesar, Magdalena, La Guajira y Norte de Santander.
5. El ICBF hace un llamado a los medios de comunicación y a la opinión pública en general para que se abstengan de divulgar la identificación de los jóvenes y demás información confidencial que pueda porner en riesgo su integridad, tal como lo señala la Ley 1098 de 2006, Código de la Infancia y la Adolescencia.
6. Así mismo, el ICBF invita a ciudadanía a ponerse en contacto con la Policía Nacional a través de la línea 123 o con las demás autoridades competentes, de conocer información sobre el paradero de los tres jóvenes que continúan profugos de la justicia.