El presidente Gustavo Petro llegó este miércoles 28 de agosto a Nabusímake, capital del pueblo arhuaco, en jurisdicción del municipio de Pueblo Bello, Cesar, con el objetivo de dialogar con los indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta.
El mandatario inició resaltando la importancia que las etnias le han dado a lograr la paz con la naturaleza, asegurando que ese debe ser “el centro del debate político del Cesar”, pero también del Caribe, desde donde se desarrolla la mayor producción y exportación de carbón térmico de Colombia.
La crisis climática
Eso significaría, según el presidente, reconocer la problemática central de la humanidad en la actualidad, y es la crisis ambiental. “¿Por qué es tan agudo el fenómeno de El Niño en Colombia? Por el consumo del carbón, eso no lo dice Petro, lo dicen 4.000 expertos del mundo reunidos en el panel de Naciones Unidas sobre crisis climática”, expresó.
“Si la ciencia está diciendo que entre más arrojemos los residuos gaseosos del consumo del carbón, del petróleo y del gas a la atmósfera, más se calienta el planeta, más cambian los ciclos del agua y más pronto se acaba la vida en el planeta, ¿qué hacemos, nos ponemos a sacar más carbón o repensamos el territorio?”, preguntó Petro.
El futuro de las minas en el Cesar y La Guajira
Al presidente lo acompañaron las autoridades indígenas, la gobernadora del Cesar, Elvia Milena Sanjuán, el alcalde del municipio de Pueblo Bello, Alfredo Bohórquez, la ministra de Ambiente, Susana Muhamad, Leonor Zalabata, embajadora de Colombia ante las Naciones Unidas, entre otros funcionarios del orden local y nacional.
El jefe de Estado continuó afirmando que desde la multinacional Glencore (propietarios de Cerrejón, en La Guajira, y de Prodeco, el cual devolvió los títulos mineros que operaba en el Cesar) le han dicho al Gobierno 3 veces que se van del país.
“Ellos, suizos, han hecho sus cálculos: la humanidad dejará de consumir carbón porque prefiere vivir”, precisó el alto funcionario, quien volvió a asegurar que el carbón es el principal “veneno” del mundo, más que drogas como el fentanilo.
En proceso de reserva
“Nos puede matar a toditos, puede dejar desierta a Colombia en el 2070, nos avoca abrir los ojos y buscar otras formas de desarrollo económico, de enriquecimiento y de prosperidad y los primeros que deberían desarrollar ese debate son los territorios donde están esos enormes cráteres chupándose el agua: Cesar, La Guajira y Magdalena”.
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Es preciso recordar que las minas que operaba Prodeco en el Cesar, Calenturitas y La Jagua, están en proceso de convertirse en reserva para recuperar el ecosistema y desarrollar desde allí proyectos de energía renovable de fuentes no convencionales.
Hasta el pasado 24 de agosto el Gobierno nacional recibió los comentarios sobre esta propuesta que no fue bien recibida por la dirigencia del departamento del Cesar, cuyos ingresos dependen, en aproximadamente 40 %, de la explotación de carbón.
Por Andrea Guerra EL PILÓN.