En seis corregimientos y 84 veredas del municipio de Pueblo Bello, Cesar, la Unidad de Restitución de Tierras (URT) documentará casos de despojos de tierras. Así lo dio a conocer el director de la URT, Cesar y La Guajira, Jorge Chaves Perdomo, quien especificó que recibirán las solicitudes de la población para ser incluidos en el Registro de Tierras Despojadas y Abandonadas Forzosamente, luego la unidad revisará los casos y de ser viables delegará las funciones a los jueces.
Con los trabajos en estas zonas, la URT completa la cobertura en todo el departamento. “Me complace indicar que la Unidad ha terminado estudio en el 80 % de los reclamos en esta zona e iniciará estudios en este municipio”, aseguró el director de la entidad.
Muchos campesinos sufrieron las humillaciones del desplazamiento forzado en el corregimiento de Nuevo Colón, en Pueblo Bello, cuando un grupo guerrillero se apoderó de las tierras y la gran mayoría de sus bienes. Los hechos violentos se remontan al 22 de marzo de 2002, cuando dos campesinos de una misma familia fueron asesinados por la guerrilla en el interior de su vivienda.
A la fecha, en el departamento hay cerca de 4.000 hectáreas restituidas, a favor de las víctimas del conflicto armado interno, que corresponde a 200 familias que se encuentran disfrutando de las tierras que habían sido despojadas o abandonadas, a causa de la barbarie propia de la guerra.
“La Unidad radicó ante jueces y tribunales de restitución cerca de 800 demandas. La restitución le aporta a la paz y al posconflicto porque, a través de esta política, buscamos que nuestros campesinos regresen al campo. Quienes ya retornaron cuentan con cultivos de ganadería a pequeña y mediana escala y proyectos de agricultura”, puntualizó el director de la URT.