El bebé que aparentemente de manera violenta había sido arrebatado de los brazos de su madre indígena por su progenitor regresó al seno de su hogar en un inmueble del municipio de Pueblo Bello, Cesar.
El pequeño fue encontrado en un operativo que realizó la casa de gobierno arhuaca con el apoyo del personero municipal.
“Resulta que había un problema de violencia intrafamiliar entre una pareja de wiwa, entonces el señor al querer irse se llevó al niño que estaba desaparecido”, manifestó Roberto Marín, personero de Pueblo Bello.
Agregó que el bebé lo localizaron en buen estado de salud en el corregimiento de Azúcar Buena en poder de unos familiares paternos.
“El señor está siendo investigado y procesado por la jurisdicción especial indígena en Pueblo Bello”, agregó Marín.
La desaparición de la criatura la denunció la progenitora del menor el pasado fin de semana.
La mujer aseguró que su compañero sentimental la golpeó y le arrebató al menor de edad dentro de su casa.
“Me dijo que lo iba a regalar y que si quería verlo tenía que darle plata y no me dijo más nada”, denunció la fémina wiwa.
Por eso, la mujer acudió a las autoridades que de inmediato iniciaron las labores de búsqueda para la ubicación del menor de edad.