Mediante un acto simbólico cerca de 80 familias del corregimiento Los Brasiles, del municipio de San Diego, Cesar, desplazados del predio conocido como ‘El Toco’ conmemoraron ayer 20 años de una de las tres masacres de las que fueron víctimas.
Se trató de la ocurrida el 19 de mayo de 1997, cuando paramilitares del frente Juan Andrés Álvarez del Bloque Norte de las Autodefensas, incursionaron en el pueblo y con lista en mano torturaron y mataron a los parceleros: Víctor Plata y José Yance, quienes eran vocal y fiscal de la Junta de Acción Comunal, respectivamente; Daniel Plata, Hernán Pinedo y Joaquín Gaviria. En otros hechos también fueron asesinados tres personas del corregimiento, Lenis Álvarez Mejía, Edgar Vásquez Mejía Barona y Daniel Quintana.
Veinte años después, las víctimas de El Toco se sienten abandonadas por las autoridades. Así lo manifestó Miguel Ricardo, presidente de la Asociación de Campesinos Desplazados de El Toco – Asocomparto.
“En el proceso de restitución de tierras las autoridades no han tenido legitimidad con las comunidades de Los Brasiles ni de El Toco, por ello hemos querido conmemorar a nuestras víctimas”, indicó el líder.
Restitución sin garantías
El pasado 17 de septiembre, Blanca Rodríguez Peñaranda recibió desde la Unidad Nacional de Restitución de Tierras, el título de propiedad de la parcela 27 o ‘Las 4Y’, ubicada en el predio conocido como El Toco.
Sintió mucha felicidad y quiso dejar atrás lo que vivió ese 19 de mayo de 1996, cuando junto a su esposo y sus tres hijos, fueron obligados a abandonar su tierra y desplazarse al municipio de Codazzi, como consecuencia de una incursión paramilitar en el corregimiento Los Brasiles.
Sin embargo, pese a que 20 años después el Tribunal Superior de Antioquia, especializado en restitución de Tierras falló a favor de esta mujer y su familia, el ocupante de esa tierra hoy no la deja ingresar a su propiedad y dice que siente temor por su integridad y la de su familia.
Las beneficiarias de esta restitución manifiestan que no tienen las garantías para volver a El Toco, donde a pesar que el día que le entregaron la propiedad estaba desocupada, el ocupante volvió a ingresar al lugar, manifestando que de allí no iba a salir.
“No hemos vuelto por temor de que el señor vaya a tomar represarías en contra de nosotras”, indicó Yuliana Camargo Rodríguez, hija de Blanca.
Respuesta de la unidad
El director territorial de la Unidad de Restitución de Tierras para Santander y Magdalena Medio, actualmente encargado de la dirección territorial, Cesar- Guajira, Fabio Andrés Camargo Gualdrón, dijo: “El Toco es uno de los casos más importantes y trabajados por la unidad en esta dirección territorial, fue una de las primeras microfocalizaciones y hoy tenemos muy buenos frutos con personas que ya se les ha hecho restitución material porque los jueces reconocieron su calidad de víctimas, más de 1000 hectáreas restituidas, más de 30 predios, familias con proyectos productivos unos más adelantados porque todas las sentencias no han salido al mismo tiempo”.
Ante las quejas de la comunidad la Unidad de Restitución de Tierras revisará la situación para garantizar que retornen seguros a sus predios y al mismo ritmo continuará restituyendo.