El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, pedirá a su gobierno que proceda en la reunificación de las familias inmigrantes que han sido separadas desde abril, una situación que afecta a más de 2,300 niños, anunció este jueves durante una reunión con su gabinete.
También dijo: “Estoy ordenando al Departamento de Salud y Servicios Humanos, al de Seguridad Interior y al de Justicia que trabajen para mantener juntas a las familias de inmigrantes ilegales y reunir a esos grupos que antes estaban separados”.
Esa orden supone un paso más respecto a la que Trump emitió con su decreto del miércoles, que ponía fin a la división de los niños inmigrantes de sus padres en la frontera con México, pero no resolvía la situación de los menores que ya han sido separados de sus progenitores. “Tenemos que albergar a estos menores y tenemos que albergarlos de forma segura, y cuidarlos, y después deberíamos devolverlos a casa”, defendió Trump.
Los niños indocumentados no serán separados de sus padres, en los centros de detención de inmigrantes serán retenidos indefinidamente junto a sus familiares.
El presidente Donald Trump no dio detalles sobre cómo se facilitará esa reunificación, y centró la mayor parte de su discurso en criticar a la oposición demócrata y acusarla de ser la raíz del problema.
Por otro lado, CNN informó sobre “el más grande paso atrás del presidente que está provocando un nuevo caos político y legal”, y nuevas acusaciones de inhumanidad hacia estos niños a partir del decreto firmado este miércoles, donde señala que la Casa Blanca debería mantener juntas a las familias que cruzaron la frontera de Estados Unidos ilegalmente. Entre tanto, la esperanza de que el Congreso pudiera acabar la crisis en la frontera sur con una votación este jueves en varios proyectos importantes de inmigración, fue atemperada por divisiones entre los legisladores entre quizá el tema más divisivo en la política moderna.
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