A pesar de los extremos políticos en los que están los dos candidatos que siguen en la contienda por la Presidencia de Colombia, ambos tienen algo en común: propuestas populistas con las que buscan atraer al electorado, y que en la realidad no son tan fáciles de cumplir. EL PILÓN consultó a Carlos Cesar Silva, analista político y Gustavo Banderas, decano del programa de Derecho de la Universidad del Área Andina, quien con el abogado Renato Martínez Martínez, analizan qué tan realizables son algunas de esas propuestas.
PROPUESTA DUQUE
Cadena perpetua para violadores y asesinos de menores
Carlos Cesar Silva: Despierta el entusiasmo de las personas porque da la impresión de que es una manifestación plena de justicia. Todos queremos el máximo castigo para este tipo de criminales, pero hay que entrar a analizar varios factores: el colapso del sistema carcelario en Colombia y tendría que reformarse la Constitución, especialmente el artículo 34, que prohíbe la cadena perpetua. Además, nuestra configuración de Estado Social de Derecho busca más la resocializaición del criminal que un castigo perpetuo.
Gustavo Bandera y Renato Matinez: Es un clamor nacional que él está escuchando y en el que la gran mayoría de los colombianos estarían de acuerdo. De hecho, hace poco el Senado aprobó la castración química para los violadores de niños. En lo que deberá pensar es en actualización del sistema penitenciario y la ampliación de su cobertura. En línea con la prisión como medida de control, disciplina y corrección.
Cárcel con barrotes para los corruptos. No más prisión domiciliaria.
Carlos Cesar Silva: Todos queremos que los corruptos estén presos. En principio, resulta difícil no estar de acuerdo con esta propuesta. El asunto es que no es muy creíble en Duque, cuando nos damos cuenta que está rodeado de varias personas que tienes cuestionamientos: Alejandro Ordóñez, Luis Alfredo Ramos y el mismo Alvaro Uribe. Hay que decirle a Duque que, efectivamente, queremos a todos los corruptos presos, pero absolutamente a todos.
Gustavo Bandera y Renato Matinez: Esto es algo normal en una sociedad civilizada, pero se debe mirar el trasfondo de lo que quiere decir Duque. Esto va en línea con la su postura de revisar algunos acuerdos recientes en los que no se dio la medida de aseguramiento intra mural a los jefes guerrilleros luego de los acuerdos de paz.
Creación de una súper corte. Unificar las cuatro cortes, más el Consejo Nacional Electoral
Carlos Cesar Silva: Aunque asegura que no la va a imponer sino que la va a consensuar con el país, con los magistrados de las altas cortes, con el Congreso, la propuesta genera temor porque al ser Duque presidente y estar Uribe en el Congreso, puede haber una concentración de poderes en el uribismo. Además existe una especie de sesgo por desaparecer la Corte Constitucional porque no comparten las tesis que han tomado con la aprobación de algunas iniciativas.
Gustavo Bandera y Renato Matinez: Lo podría hacer a través de una reforma constitucional por medio del congreso si cuenta con el apoyo de la mayoría. Pero debemos recordar que la Constitución de 1991 nace como una respuesta a la crisis institucional, política y social que se vivía a finales de los años 80. La propuesta de la creación de una súper corte atenta contra la especialidad que tienen los altos tribunales en la actualidad. Es además un salto al pasado hacia la Constitución de 1886, ahora incluyendo la supresión del Consejo de Estado. Toda vez que cada una de las cortes que pretende suprimirse tiene tareas que son jurídicamente sensibles.
PROPUESTA PETRO
Eliminación de las EPS y ARL. Crear un sistema único de salud pública
Carlos Cesar Silva: Eso sería lo ideal. El asunto es que se logre concretar eso en los cuatro años de gobierno de manera serena, sin crear traumatismos. Se requieren cambios en el sistema de salud, pero deben ser planificados y bien ejecutados. El remedio no puede ser peor que la enfermedad, desaparecer las EPS y las ARL sin un plan puede generar caos en el servicio de salud.
Gustavo Bandera y Renato Matinez: Para hacerlo primero deberá modificar o derogar la Ley 100 del 1993 ante un Congreso de la República que no le pertenece, y del que se estima que casi un 80 % de sus integrantes son sus detractores. Si pasa este escollo deberá entonces proponer un nuevo mecanismo para la administración de la salud en Colombia, el cual también deberá ser aprobado por el mismo congreso. Luego deberá modificar la Ley Estatutaria de Salud acudiendo a la Corte Constitucional. Además, deberá crear un(os) organismo(s) para administrar el sistema que aunado a lo anterior es complejo por la cantidad de normas dispersas que los regulan.
Instalación de paneles solares en todas las casas
Carlos Cesar Silva: Es una propuesta que llama mucho la atención. Sin lugar a dudas, Petro está hablando del futuro. Hay que admitir que él puso en la mesa el tema del medio ambiente y las energías limpias. Sin embargo, esto tiene varios obstáculos para el futuro inmediato: la redes eléctricas de algunas regiones no están preparadas, aunque también se podrían emplear paneles con baterías, pero el problema sería que, en promedio, la vida útil de una batería es de siete años y el costo compone el 30% de la inversión inicial.
Gustavo Bandera y Renato Matinez: A pesar de ser una idea ambiciosa podría lograrse en el mediano plazo, teniendo en cuenta que puede ser una fuente laboral nueva y la implementación del conocimiento en las bases laborales puede ser efectuada a gran escala a través del SENA. Lo que no convence a estos analistas es la idea de abandonar el principal producto de exportación en cuanto a divisas se refiere, dejando secundariamente la producción de petróleo y sus derivados. Esta parte de la propuesta aunque no se mencioné directamente, debe tenerse en cuenta, porque implicaría una revolución en la economía del país y tal vez no estemos preparados para este cambio aun.
Compra de latifundios improductivos para producción campesina
Carlos Cesar Silva: Esta propuesta me parece realizable, pero con garantías legales y constitucionales. Es propia del sistema capitalista, busca más bien la producción de la tierra. En el gobierno de Uribe se propuso, puntualmente en el 2008. En ese entonces, plantearon la expropiación de grades hectáreas de tierras ociosas en defensa del bien común, que serían pagadas a su valor catastral. Aquí el temor es que Petro aplique esta figura de manera amenazante, arbitraria, ilegal.
Gustavo Bandera y Renato Matinez: Con esto lo que se buscaría es que esos grandes tenedores abaraten sus tierras y el estado pueda adquirirlas para dos fines: la recapitalización del estado y su fortalecimiento; y la repartición de estas tierras entre los campesinos para lograr convertirlos en productores rurales, generando arraigo, dignidad, empleo y productos competitivos para exportación y consumo interno. Esto puede ser viable. Pero Petro deberá diseñar un mecanismo para esos fines, por ejemplo una entidad estatal para ese proceso.