Familiares del jornalero Rafael Corzo Arzuza, de 40 años, cuyo cadáver fue encontrado el miércoles a orillas del río ‘El Diluvio’ en zona rural de Valledupar, manifestaron que lograron identificar a su ser querido desaparecido hacia seis días, por una cicatriz y una uña del pie.
Ayer se agolparon a las afueras del Cementerio Nuevo de Valledupar los familiares del campesino, quienes aseguraron que guardaban la esperanza de volver a verlo con vida.
“Mi papá salió de una finca hacia la casa de la hermana y tenía que atravesar el río y ese día se presentó una creciente súbita por lo cual iniciamos su búsqueda”, dijo Willian Corzo.
El hallazgo del cadáver lo realizó un trabajador de la finca ‘El Diluvio’, a las 10:00 de la mañana del miércoles pasado.
Rafael Corzo Arzuza, era natural de Villa Germania y trabajaba en la finca ‘La Planada. Allí vivía con Ernestina Castilla con quien tuvo cuatro hijos. Su sepelio se cumplió ayer en la capital cesarense.