El pasado martes, en la ciudad de Cartagena, turistas y residentes presenciaron un indignante caso en el que una extrabajadora fue retirada a la fuerza por la Policía cuando reclamaba el pago de su liquidación en una reconocida tienda de ropa.
Se trata de Norelys Álvarez, una mujer venezolana que reside en Colombia desde hace cinco años, y quien en una entrevista con Blu Radio contó su versión luego de que se difundiera un video en el que se observa cómo la Policía la saca esposada y con un bebé en brazos de un local comercial de Jon Sonen.
De acuerdo con la mujer, “no hubo ningún detonante” para que la situación llegara a necesitar de una patrulla de la Policía.
“Hay una carta que la empresa me envía de un traslado para Yopal, Casanare. Yo desconocía todo, fui a solicitar ayuda y un abogado me explicó por qué no podía aceptar ese traslado. ¿Cómo me iba a ir cuando tenía una niña de seis meses y un niño?, además de mi mami, ¿quién cuidaría a los niños?; yo era el sustento de ese hogar”, puntualizó.
Asimismo, la mujer comentó que luego de esto fue notificado su despido “por justa causa”, ya que no acató los cambios del empleador. “Ellos me despiden por no aceptar el cambio. En la empresa no me explicaron porqué me movían de punto, solo hablaba de un traslado (…) Yo no podía”.
De acuerdo con sus declaraciones, la tienda le debe una liquidación de $4 millones y a la fecha no sabe por qué no le han pagado.
Luego de hacerse pública la situación, se conoció que la Procuraduría indagará de forma preliminar a los agentes que esposaron a Álvarez.