Luego de casi 24 horas de haber sido víctima de un caso de fleteo, la árbitro profesional FIFA, Martha Liliana Toro, aún no ocultaba en su rostro el nerviosismo y la preocupación por el susto que vivió la tarde del martes, cuando fue abordada por dos atracadores en motocicleta en uno de los parqueaderos del centro de Valledupar.
Explicó que en el banco le entregaron varios fajos de billete, pero de $20.000, “lo que les hizo pensar a los asaltantes que la cuantía era mayor y por eso me hicieron el seguimiento con una información errada”, al señalar que para esa transacción bancaria, no solicitó el acompañamiento de la fuerza pública.
Señaló que ese trance en su vida, ha sido uno de los de los peores momentos y difíciles que ha vivido, pero que Dios fue muy bondadoso con ella, porque recuperó el bolso con el dinero, “no se perdió un solo peso, pero lo único que sí no pudo encontrar dentro del bolso fue la llave del vehículo, porque la había metido allí”.
El comandante de la Policía Cesar, coronel Mauricio Pedraza Rocha, destacó la colaboración ciudadana que permitió con el exitoso operativo, tras señalar que los capturados responden a los nombres de Jorge Enrique Oviedo y Jorge Mario Torres, quienes tenían medida de detención domiciliaria por los delitos de hurto y porte ilegal de armas de fuego. El primero de ellos gozaba del beneficio desde el 27 de diciembre de 2017 y Torres desde el 15 de diciembre del mismo año, a quienes les encontraron $3.700.000 y 200 dólares, al igual que les incautaron un revólver marca Llama calibre 38 largo, que tenía borrado los sistemas de identificación. Se movilizaban en la motocicleta marca Suzuki AX4 color rojo, de placa RKR-63D.
Cronología
Martha Liliana Toro tenía en su bolso un $1.200.000 en efectivo y se trasladó hasta la oficina de Davivienda en el centro comercial Mayales, al sur de Valledupar y retiró $3.000.000, con los cuales completaría el pago para una vivienda que tenía negociada con la firma constructora Maya y Asociados, ubicada en la zona bancaria.
“Pienso que a mí me marcaron dentro de la entidad crediticia, es decir, entregaron mis características como la ropa que llevaba puesta y mi fisionomía. Sin ninguna sospecha me embarqué en el vehículo y continué la marcha hacia el centro y estoy casi segura que desde ese mismo lugar me siguieron y durante el recorrido, parece que no les di oportunidad para cometer el ilícito, porque llegaron hasta el mismo parqueadero donde guardé el carro, para hacer la diligencia de la casa”, explicó.
La juez arbitral, quien trataba de bajarse de su vehículo marca Hiunday línea Tucson junto a uno de sus sobrinos, fue encañonada por el parrillero de la motocicleta advirtiéndole que el entregara el bolso, en cuyo interior habían $4.200.000, tarjetas de crédito y débito, documentos, celulares y otros elementos de valor que ascendían a $6.000.000.
Tenían prisión domiciliaria
Los fleteros quienes tenían cuentas pendientes con la justicia bajo detención domiciliaria, emprendieron la huida pero la alerta de la comunidad, que entregó de manera oportuna detalles de los asaltantes, hicieron que el cuadrante del sector bancario hiciera la persecución en medio de un intercambio de disparos.
La persecución terminó en un sector del barrio Primero de Mayo, en donde los delincuentes tropezaron a uno de los vehículos de la Policía, perdieron el control cayendo al suelo, sin que recibieran lesiones de consideración. De inmediato se pararon y salieron corriendo para tratar de refugiarse en una vivienda que encontraron abierta, pero fueron alcanzados. El arma de fuego, solo tenía dos cartuchos en el tambor, uno de ellos disparado contra la Policía.
Por Abdel Martínez Pérez /EL PILÓN