Por: Hermes Francisco Daza
La construcción de un nuevo pueblo del grupo étnico Wiwa, en jurisdicción del municipio de Riohacha, es gestionado entre el gobierno nacional, el departamento de La Guajira y la alcaldía de Riohacha, según lo confirmó el asesor departamental para la Prosperidad Social y la Fronteras, Wilson Rojas Vanegas, quien dijo que hacen parte del proceso autoridades y líderes de ese grupo indígena de la Sierra Nevada de Santa Marta.
El nuevo pueblo que se llamará Buncuamaque, estaría ubicado en la cuenca del Rio Tapia, subiendo por el Carmen, corregimiento Juan y Medio y quedará conformado por 8 comunidades, contando con una infraestructura social en educación, salud y nutrición.
Para la construcción de este nuevo pueblo talanquero se comprarán 50 hectáreas, iniciando con 50 millones de pesos aportados por la Gobernación de La Guajira, y mil millones aportados por la nación a través del Departamento para la Prosperidad Social, DPS.
Los recursos serán utilizados en la construcción de 15 Viviendas y un Colegio de 8 aulas, donde se impartirán clases de preescolar, primaria y hasta noveno grado de Educación Básica Secundaria.
También se construirá un internado, al igual que un Centro de Salud, un Comedor Escolar y un centro de Recuperación Nutricional.
Los representantes de las entidades comprometidas en el proyecto señalaron que además de estas construcciones, al nuevo pueblo talanquero le haría falta los diseños de las infraestructuras, un acueducto, energía eléctrica, dotación escolar y vías de acceso.
Los compromisos quedaron distribuidos de la siguiente manera: la Corporación Autónoma Regional, Corpoguajira, ayudará con el acueducto, la Alcaldía, con la solución de energía en 3 km y la construcción del centro Etno-educativo, mientras la Fundación Cerrejón, colaboraría con los diseños teniendo como referente los diseños de Achintukua, inaugurado el pasado mes de julio en el municipio de San Juan del Cesar.
Wilson Rojas precisó que entre los compromisos pendientes de la Gobernación y Alcaldía, está en análisis al tema del retorno de los indígenas del Limón y otras zonas de las estribaciones del macizo montañoso que huyeron en el año 2001 de los enfrentamientos que por territorio mantenían grupos armados al margen de la ley.