“El hijo mío se echó a perder, cuando le decía que hiciera caso, que se compusiera un poco, siguió consumiendo droga y según me dijeron el domingo hizo un atraquito y entonces los del barrio le advirtieron que no se dejara ver la cara porque lo iban a picotear. Yo dormía y me llamaron por teléfono para decirme que estaba pica’o, yo cogí mi bicicleta y lo fui a buscar. Cuando llegué le pregunté, ¿hijo que te pasó? Y lo único que me dijo fue ¡ay apá! Agachó la cabeza y no dijo más nada. Le dije a la Policía que me lo llevaran en una ambulancia al hospital y cuando llegamos allí dijeron que estaba muerto”.
Así relató Edgar José Romero, padre del menor que falleció el lunes por la noche en el barrio El Páramo, al sur de Valledupar.
Edgar José Romero indicó que le sobraron los consejos para su hijo, para que dejara la vida andariega y violenta, sin embargo el menor le hizo caso omiso, tal cual lo hizo con las advertencias de algunos habitantes del sector antes mencionado, quienes, al parecer, lo tenían vigilado.
“Yo le decía que no llegara a El Páramo, que se cuidara, que buscara juicio que lo iban a… Pero no me prestaba atención. Él vivía en El Páramo y llegaba a la casa y le preguntaba dónde se estaba quedando y lo único que decía era que él vivía en cualquier parte”, manifestó Romero, quien agregó que al momento de encontrar a su hijo tenía dos heridas en la pierna “como para que no caminara más”, indicó.
El coronel Faiber Martínez, comandante de Policía Cesar, especificó que ante este hecho existe una hipótesis primaria, que consiste en una riña que hubo entre la comunidad en donde hirieron al menor que falleció.
“Estamos con nuestros investigadores para esclarecer el hecho y poder entregar un reporte más preciso a la comunidad”, dijo el coronel, que aclaró que era un menor que tenía antecedentes por delitos como hurto.
Por Redacción El Pilón.