Otro soldado que posiblemente resultó intoxicado en el municipio de La Jagua de Ibirico, falleció la noche del domingo en una Clínica de Valledupar. Se trata de Norbey Alejandro Bolaño Sanjuán, quien se encontraba desde hace tres días bajo observación médica.
Junto a él estaban recluidos en el centro asistencial seis compañeros que decidieron trasladarse a la ciudad de Bogotá para una atención médica especializada.
En total fueron ocho los soldados afectados, adscritos al Batallón Especial Energético y Vial N° 2, que el pasado 17 de diciembre se encontraban prestando patrullajes de seguridad a una mina de La Jagua de Ibirico.
Ese mismo día, de un momento a otro, comenzaron a presentar masivamente quebrantos de salud, por lo que fueron trasladados a una clínica de Valledupar. Sin embargo, al poco tiempo murió el primer soldado Luis Fernando Salcedo Blanco, natural del municipio de Becerril.
El Ejército Nacional indicó que desconocían de dónde provenía el deterioro de salud de los uniformados.
EL PILÓN conoció que a los militares les practicaron pruebas de Covid-19, malaria, dengue y leptospirosis (enfermedad infecciosa asociada a ratas), y resultaron negativas.