Al terminar un consejo de seguridad en instalaciones de la Alcaldía de Valledupar, junto a las autoridades civiles y la Fuerza Pública de la región, el ministro de Defensa, Guillermo Botero, solicitó reforzar las medidas contra el ganado de contrabando, que proviene del vecino país de Venezuela, y que generó un brote de fiebre aftosa en el Cesar y La Guajira.
Botero, que dio cuatro anuncios, indicó también que trabajará para que la Policía Metropolitana de Valledupar sea una realidad durante este gobierno.
Primero dijo que se dieron instrucciones precisas a la fuerza para prevenir, controlar y perseguir a las organizaciones criminales dedicadas al contrabando de ganado y el abigeato, a través de actividades de inteligencia y de investigación criminal focalizadas y priorizadas.
En ese contexto, advirtió se realizarán los controles viales con la instalación de puestos articulados interinstitucionales y el desarrollo de operaciones de control territorial para atacar estos fenómenos delincuenciales.
Guillermo Botero pidió a la ciudadanía denunciar estas actividades ilegales, para que la Fuerza Pública y las autoridades judiciales puedan actuar de manera contundente contra estas expresiones criminales.
Y finalmente, el ministro de Defensa dio instrucciones a la Policía Nacional para que “en el corto plazo se disponga de los 300 uniformados, una vez finalice la construcción de las instalaciones por parte de la Gobernación del Cesar y la Alcaldía de Valledupar”.
Al preguntarle a Botero si este tipo de acciones no se vienen haciendo, respondió que la idea es reforzarlas, para así controlar el ingreso de ganado que llega por el departamento de La Guajira y se extienden hasta el Cesar.
La visita de Guillermo Botero se concretó luego de la visita hecha al departamento por el canciller Carlos Holmes Trujillo, quien manifestó su preocupación por el impacto que ha generado la migración proveniente de Venezuela en esta zona del país, donde según datos de Migración Colombia “en el departamento del Cesar hay 32.741 venezolanos, 28.000 de los cuales están en Valledupar, y adicionalmente se encuentran 12.000 colombianos retornados de Venezuela”. “Esto convierte al Cesar en un sitio para importancia crítica para el gobierno del presidente Duque”, explicó Trujillo.