“Está demostrado que no es viable, tiene un gasto que supera los 345 millones de pesos, según el gerente de Mercabastos se están recaudando 300 millones de pesos, lo que quiere decir que todos los años pierde entre 45 y 50 millones de pesos”, así se refirió el concejal Gabriel Muvdi Arangüena respecto a la continuación o no de la Empresa Comercializadora Mercabastos.
Para el corporado, en más de 15 años que lleva la comercializadora, todavía no ha podido vender 40 bodegas, por lo que consideró que lo mejor es entregarlo a una empresa privada para que en dos meses salga de estos depósitos.
“Aquí lo que se está es perdiendo la plata y no solamente cuando hablamos de Mercabastos como Mercabastos, estamos hablando de todas las bodegas que tiene el Municipio, que hoy en día están siendo usufructuadas por otras personas y el Municipio perdiendo plata en intereses como es el tema del lote del Idema, que están pagando dos millones cuatrocientos mil pesos (arrendatario), pero vamos a ver cuánto está pagando el Municipio por los siete mil millones de pesos que le debe al Ministerio”, dijo Muvdi Arangüena.
Los concejales criticaron duramente a la comercializadora Mercabastos.
También se refirió a lo que considera burocracia en Mercabastos, debido a que hay 11 funcionarios que no han logrado vender las 40 bodegas que hoy tiene el Municipio.
“En el período pasado demostramos que esto era pura burocracia lo que se está manejando y los administradores y los alcaldes mantienen todavía Mercabastos vivo, los 11 puestos están ahí y le sirven a cualquiera”, agregó.
Entre tanto, Adriana Mejía explicó que la comercializadora no es viable y hay otras necesidades prioritarias como es la de hacerle inversiones al pabellón del pescado que no reúne las medidas sanitarias.
“Lo que vemos ahí es una burocracia, se está haciendo un gasto de presupuesto de más de $345 millones y creemos que no es viable, como corporados que somos vamos a tomar una determinación”, dijo Mejía.
Explicó que una cosa es la comercializadora y otra la Central de Abastos que seguirá funcionando, “pero vemos que el presupuesto que se está invirtiendo en la comercializadora lo podemos invertir en otra oportunidad de trabajo como arreglar el pabellón del pescado, arreglar cosas de prioridad que le puedan brindar oportunidades de trabajo al municipio”.
Mejía dijo que el lote de Idema fue alquilado en dos millones cuatrocientos mil pesos mensuales a un inquilino que la tiene para secar café, cuando allí podría funcionar la Secretaría de Tránsito.
Hernán Felipe Araújo explicó que le preocupa la manera en que se está manejando la comercializadora, “el gerente nos dice que depende que los locatarios de Calle Grande que pagan o no pagan, creo que con el Municipio hay que ser responsable y si es necesario actuar a través del cobro coactivo, pero lo que no podemos es sostener una burocracia, unos funcionarios prestando un servicio que bien pudiéramos prescindir de ellos y los recursos que entran para sostener estos funcionarios pudiéramos utilizarlos para hacer cualquier otra obra en la ciudad”.
Según explicó, el gerente dijo en el debate que la comercializadora tiene un presupuestos de 340 millones de pesos al año, pero facturan 30 millones de pesos mensuales, pero a veces pagan 25, a veces pagan 20, por lo que considera que se le debería dar manejo para no tener la carga con los funcionarios con los que hoy cuentan.
El gerente de Mercabastos, Jhonny Hernández se defendió y dijo que ésta es una empresa comercial e industrial del Estado que tiene en administración el centro comercial Calle Grande, bodegas de la Central de Abastos y otros bienes del Municipio, “en este momento estamos haciendo una serie de planteamientos para recaudar unos recursos que se le adeudan a la comercializadora y transferirlos al Municipio para que pueda hacer obras en beneficio de la comunidad”.
Destacó que la actual administración en conjunto con la Policía mejoró y sacó la extorsión del lugar.
De igual modo dijo que no comparte la apreciación de que sea inviable, “porque se está haciendo una labor importante, tratando de recaudar a través de arriendo y venta de unos locales comerciales los recursos que son transferidos al Municipio para hacer obras”.
Sandra Santiago B.
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