A diferencia de lo que se suele pensar al momento de iniciar una vida sexualmente activa, existen muchas maneras de obtener placer y van más allá del simple contacto con alguien. El sexo es uno de los más grandes tabúes alrededor del universo, pero más aún si se trata de parafilias. Necio es quien cree que sobre gustos no hay nada escrito. El tema hoy en la cama es el de las parafilias y más de cien formas de conseguir placer sin medidas.
Cuando se habla de parafilia se habla de una serie de comportamientos sexuales considerados extraños. Con el paso del tiempo, estas conductas se han ido modificando en cuanto al pensamiento social y hoy en día, algunos son considerados de otro modo, habiendo casos que son más aceptados en la actualidad, pero que siglos atrás eran vistos como tabú.
La parafilia es básicamente un tipo de comportamiento, una experiencia específica en donde el placer o el orgasmo se consigue fuera de los límites de las relaciones convencionales. El comportamiento implica fetiches sexuales y tanto la excitación como la gratificación sexual de la persona dependen del fantasear y practicar actos sexuales raros y en otros hasta extremos.
Una parafilia puede girar en torno a varios factores; el fetiche sexual con un objeto como la ropa interior, los muñecos, animales o bien el acto del fetiche sexual que incluya una experiencia como dar órdenes, provocar o recibir dolor. Hay quienes suponen que aquellas personas que practican algún tipo de parafilia lo hacen porque ya están cansados del sexo convencional y esto ya no les satisface, buscando entonces placer de otra manera.
Existen más de 80 parafilias conocidas; aunque hay quienes dicen que van entre las 500 y las 550 parafilias diferentes y con subcategorías.
¿Con cuál se identifica?
* Agorafilia: atracción por realizar prácticas sexuales en lugares públicos.
* Alorgasmia: fantasear durante el acto sexual con otra persona que no sea la pareja.
* Altocalcifilia: atracción proveniente de los zapatos de tacones altos.
* Anisonogamia: atracción por una pareja sexual mucho más joven o mucho mayor.
* Asfixiofilia: estrangular, asfixiar o ahogar a la pareja durante el acto sexual, con su consentimiento y sin llegar a matarla.
* Candalagnia: excitación sexual al ver a la pareja teniendo sexo con otra persona.
* Clastomanía: excitación por romper la ropa que la pareja lleva puesta.
* Fetichismo: fantasías y deseos a partir del uso de objetos o partes del cuerpo que son el centro de su atención.
* Hirsutofilia: atracción por el vello.
* Necrofilia: atracción sexual por los cadáveres.
* Oseofilia: excitación sexual por los huesos de otra persona.
* Pedofilia: atracción hacia personas menores de edad.
* Sadismo: experimentar placer erótico al provocar dolor físico o humillación en la pareja.
* Zoofilia: atracción sexual hacia animales.
Es importante aprender a manejar de forma adecuada la parafilia para poder realmente disfrutar. Pero también aprender a identificar las complicaciones que pueden llegar presentarse y cuando no se pueda alcanzar el disfrute pleno de la sexualidad sino solo a través de estas; por lo cual debería buscar un especialista para resolver el problema.