El jueves anterior volvió a Valledupar la macabra escena de homicidios perpetrados por sicarios en moto, disparando sin piedad contra las víctimas, crimines que no ocurrían en esta capital desde el pasado 18 de abril, cuando fueron asesinados a tiros un prestamista y su hija de once años a las afueras del Colegio ‘Milciades Cantillo Costa’.
Fue atacado en la esquina de la manzana 8 casa 20 del barrio Casimiro Maestre, por sicarios que le propinaron cuatro impactos de bala en la cabeza.
Habitantes del sector desconcertados observaron como los pistoleros huyeron, dejando a la víctima tendida en el pavimento y sin signos vitales.
Ayer los familiares protagonizaron desgarradoras escenas de dolor a las afueras de la morgue de Medicina Legal y Ciencias Forenses, mientras esperaban los restos de su ser querido para trasladarlo a su natal Barranquilla.
Las investigaciones
Yasser Stitt Altamar, era el jefe de seguridad de la comercializadora de hortalizas y verduras Surtifruver- ubicado en la diagonal 18 con calle 18B de Valledupar-, establecimiento que el 24 de agosto de 2011, fue objeto de un atentado que ocasionó daños menores en la fachada.
El 15 de septiembre del mismo año, el establecimiento sufrió otro atentado con explosivos, pero en esa ocasión los peritos de la Policía lograron detonarlo de forma contralada.
Por lo anterior, las autoridades tratan de establecer si la muerte de este hombre estaría relacionada con los atentados a su lugar de trabajo o con ajustes de cuentas, teniendo en cuenta que tuvo varios procesos judiciales.
“Cuántas veces no le dije a Yasser que se retirara de ese trabajo, ese local tenía muchos problemas. Yo no quería que siguiera trabajando ahí. La última vez que hablamos me dijo que iba este domingo a Barranquilla para celebrar el día de las madres y me dijo que se iba a retirar de Surtifruver con tal de que yo no siguiera sufriendo”, dijo Maritza Altamar, madre de la víctima.
Entre tanto, el comandante de la Policía Cesar, coronel Juan Pablo Guerrero Vallejo, manifestó “estamos confirmando la información sobre unos requerimientos que tenía esta persona por los delitos de lesiones personales, falsedad en documento y extorsión. Los móviles de su asesinato están en averiguación”.
Cifras
El caso de Yasser Stitt Altamar, es el segundo homicidio ocurrido en Valledupar durante el mes de mayo, mientras que en lo que va corrido del presente año se han registrado 40, la mayoría mediante la modalidad del sicariato en moto.