El senador Antonio Guerra De la Espriella visitó Valledupar con el objetivo de fortalecer su proyecto político en el Cesar y sumar votos para ser reelegido en el Congreso de la República.
En esta oportunidad, el senador ofreció un almuerzo para hablar de su proyecto, invitación que atendieron algunos integrantes de su partido, Cambio Radical, y de otros partidos, quienes al parecer no se sienten con liderazgo en sus colectividades.
El senador aprovechó su estadía en Valledupar para visitar EL PILÓN y dialogar a cerca de por qué cree que puede tener otra oportunidad en el Congreso, siendo que este es su cuarto periodo como senador.
¿Qué expectativa genera su candidatura en el Cesar?
Una vez más vengo como tanta otras veces en razón a cualquiera de mis actividades profesionales, gremiales, como funcionario, como consultor privado y esta vez como senador. Y en esa ocasión vine a compartir con unos amigos que han venido acompañando nuestro proyecto político hace unos años y a afianzar nuestras relaciones de amistad y de compromisos políticos con más personas.
Tuvimos la oportunidad de conversar con personas de otros municipios del departamento, vale la pena mencionar a nombre de Cambio Radical que este es un ejercicio a nivel nacional que lo hacemos al amparo del partido pero convocamos también a personas de otros o sin partido.
¿Cuáles fueron los resultados de la reunión desarrolladas en Valledupar?
Fue favorable, quedamos comprometidos en seguir pedaleando esta propuesta en el departamento. No estoy apareciendo políticamente en el Cesar, siempre he hecho presencia, pero en esta oportunidad estamos organizando una agenda de trabajo y presentando los antecedentes de los resultados obtenidos en el Senado. Este es mi cuarto periodo, pero más organizado de cara a lo que viene en marzo de 2018.
Cambio Radical tiene pendiente vincular al partido a Didier Lobo (exalcalde de La Jagua de Ibirico), quien también sería el candidato al Senado. Sabemos que este es un cargo de circunscripción nacional, pero que de todas formas la gente prefiere votar por el de su departamento. ¿Qué va a hacer en este sentido?
Pocos senadores han sabido interpretar la figura de la circunscripción nacional, el espíritu de esa figura es que se ejerzan liderazgos a nivel nacional y que se puedan consolidar en todas las regiones del país, por la pertenencia a lo público nuestra propuesta ha tenido acogida en diferentes partes del país. En el último debate saqué desde un voto hasta la mayor votación en los 32 departamentos y con especial concentración La Guajira, Atlántico, Magdalena, Sucre y Bogotá.
Cuando se es candidato somos un producto que se vende y en esa competencia mi nombre como producto electoral tiene todos los antecedentes y los argumentos para venderse bien y penetrar a la conciencia de las personas de cada uno de los departamentos.
Usted manifiesta que no es un aparecido en el Cesar, ¿qué evidencia hay de eso?
Como dirigente gremial de Fedepalma me la pasé buena parte del tiempo en el departamento del Cesar en los años 80; como presidente de Findeter, apoyé al alcalde de esa época, Aníbal Martínez Zuleta, con el plan centro y a Emdupar destinamos crédito para la optimización del acueducto. Como viceministro de Agricultura, di soluciones y concerté con agricultores y ganaderos y desde el Senado hemos estado apoyando estos proyectos que también favorecen al departamento. Al votar por un senador no solo se debe tener la consideración de que sea local, sino su trayectoria, su pertenencia al interés superior del país y los servicios que pueda prestar a la región desde el ámbito nacional y lo que resulte tiene que beneficiar sin miramiento local.