Un macabro asesinato se registró en zona rural del municipio de Pelaya, sur del Cesar, donde un hombre que se dedicaba a los oficios varios fue torturado al ser amarrado de pies y manos, le propinaron cuatro impactos de bala y le cortaron la lengua, según el reporte de las autoridades.
El Comando de la Policía Cesar señaló que la víctima fue identificada como Fernando Campo Herrera, de 39 años de edad, natural del municipio de Pelaya, residente en el barrio Gaitán de la misma localidad.
Asimismo indicó que el caso ocurrió en horas de la tarde del pasado jueves, en la vereda Los Laureles, jurisdicción de Pelaya, y solo hasta 6:11 de la tarde del día siguiente fue reportado el crimen a las autoridades.
A las autoridades judiciales de Pelaya y Aguachica les fue imposible llegar hasta el lugar donde ocurrió el homicidio, ante la dificultad del terreno y por protección personal, por cuanto es una zona de alto riesgo por la injerencia de algunos grupos al margen de la ley.
Las primeras informaciones que se conocieron oficialmente señalaron que el cuerpo del occiso fue recogido por personal de una las funerarias de Pelaya y trasladado a la morgue del Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses del municipio de Aguachica, donde le llevaron a cabo la inspección técnica a cadáver. De igual forma, se conoció que Campo Herrera registraba anotaciones judiciales por el delito de hurto calificado y fabricación porte y tráfico de armas de fuego.
Las autoridades iniciaron labores de investigación con allegados a la víctima para conocer detalles de su vida y establecer las causas del crimen que tiene conmocionados a los habitantes del sur del departamento del Cesar.
Como la víctima fue torturada y luego baleada, las primeras hipótesis apuntan a un ajuste de cuentas entre miembros de organizaciones criminales.