La riqueza de flora y fauna, combinada con sus hermosos paisajes y sus pisos térmicos variados, convierten al departamento del Cesar, especialmente a la Jagua de Ibirico y toda la serranía del Perijá, en uno de los destinos turísticos idóneos para hacer senderismo y ecoturismo.
Este último, según The International Ecotourism Society, TIES, se trata de un “viaje responsable a áreas naturales, conservando el medio ambiente y mejorando el bienestar de la población local”. En otras palabras, cuando participas en uno de estos viajes debes actuar de manera responsable para minimizar el impacto en el medio ambiente y en la comunidad que habita la zona. Además, aparte de ofrecer la posibilidad de estar en contacto con la naturaleza, enriquece la experiencia de cualquier viajero al promover el cuidado de la flora y fauna, y fomentar un mayor aprecio por los atractivos turísticos naturales.
En ese orden de ideas, la serranía permite realizar diversas actividades encaminadas a la naturaleza, que van desde caminar por sus gigantes montañas, hasta bañarse en sus cascadas y practicar algún deporte extremo.
MIRADORES
Esta cadena montañosa de 310 kilómetros de largo, debido a su altitud toca las nubes y ofrece a los visitantes una gama de miradores que le permiten tener vista VIP, desde sus picos montañosos las personas podrán observar el casco urbano de La Jagua de Ibirico. Algunos de estos miradores se dieron de forma natural, sin embargo, otros han sido diseñados por los campesinos que viven en las fincas que están al interior de la serranía.
El diario EL PILÓN realizó un recorrido por este macizo montañoso y encontró que a unos 45 minutos del casco urbano está la vereda Las Ánimas, al adentrarnos allí se observó la finca ‘El Diamante’, en donde hay un mirador elaborado por el propietario del lugar.
El mirador está hecho a base de madera fuerte y la entrada decorada con un arco de flores amarillas que resaltan la belleza del lugar y contrastan de manera impecable con el resto de la vegetación plantada. “Aquí vienen muchas personas a tomarse fotos en el mirador, dicen que es muy bonito. Queremos que más personas puedan admirar la vista que tenemos desde aquí”, agregó el propietario.
Por otra parte, uno de los miradores creados de manera natural es ‘Las Argentinas’, ubicado en el corregimiento La Victoria de San Isidro a la altura de las veredas Argentina Norte y Sur. El mirador en medio de su inmensidad muestra una gama de colores blancos, azules y verdes que contrastan perfectamente con la brisa y el clima frío que allí hay, y la vista al casco urbano.
AVISTAMIENTO DE AVES
La serranía del Perijá es rica en plantas y aves enigmáticas, incluyendo muchas especies que no se encuentran en ningún otro lugar de la tierra, por tanto, es uno de los mejores lugares para la observación de aves en el mundo y ha sido descrita como “el Santo Grial para cualquier observador de aves interesado en las aves de Colombia” por la Sociedad Audubon.
Esta región alberga una gran variedad de especies de aves y la lista de aves continúa creciendo cada año a medida que se explora. En 2019 se agregaron a la lista dos nuevas especies: El Periquito Pintado (Pyrrhura picta) o Cotorrita Pintada del Perijá, y el Tangara urraca (Cissopis leveriaunus) o Toche blanco y negro. La primera puede ser observada en la finca ‘No hay como Dios’, situada en una de las veredas de La Jagua de Ibirico.
“La Pyrrhura picta llega a los árboles de nuestra casa a las 6:00 de la mañana y se va como a las 11:00 de la mañana. Después de las 2:30 de la tarde vuelve, durante su estancia aquí nos acompaña con su melodía. Hace poco contamos con la presencia de uno de los máximes representantes del avistamiento de aves de Colombia, Diego Calderón, en nuestra finca, quien logró captar el ave”, señaló Nelson Quintana Romero, propietario del terreno.
Según la Asociación Colombiana de Ornitología, hasta la fecha se han registrado unas 425 especies en la serranía del Perijá en elevaciones superiores a los 800 metros.
APRENDIZAJE DE AGRICULTURA Y OTRAS ACTIVIDADES
Quienes quieran aprender sobre agricultura, procesos del café y el cacao, pueden adentrarse al interior de este macizo montañoso, en el cual podrán vivir aventuras en cascadas como Los Durán, La cueva de Los Indios, afluentes como el río Sororia, San Antonio, o hacer senderismo, visitar las veredas y practicar deportes como el rapel en la finca ‘El Milagro’ con una altura de 50 metros, o ciclomontañismo en el mirador La Divisa.
Es por eso que en aras de potenciar este eje minero del Cesar y la serranía del Perijá en general, el alcalde de La Jagua de Ibirico, Ovelio Jiménez, y la primera dama, Rita Pineda, están llevando a cabo planes que permitan convertir a este territorio en un lugar que dependa del turismo en el tiempo.
Ketty Gutiérrez Maestre/EL PILÓN