En disturbios terminó el operativo desplegado por la Policía en el municipio de La Paz, Cesar, para controlar el paso de vehículos que transportan gasolina de contrabando a este departamento desde La Guajira.
Al Hospital Rosario Pumarejo de López de Valledupar fueron trasladadas dos de las personas heridas en el enfrentamiento a bala que se suscitó a las 11:30 de la mañana de ayer, entre algunos ‘pimpineros’ y los miembros de la Policía Fiscal y Aduanera en la trocha El Manantial, cerca al barrio La Florida de la población almojabanera.
Se trata de Jaider Baena Mancera, de 26 años, que presenta un impacto de bala en la pierna izquierda y su primo José Ángel Payares Baena, de 22 años, también baleado en una extremidad inferior.
Las autoridades de manera inicial reportaron cinco heridos de consideración y en centros asistenciales fueron atendidas personas afectadas por los gases lacrimógenos utilizados por el Escuadrón Móvil Antidisturbios, ESMAD, de la Policía para controlar la turba.
Llantas quemadas y piedras lanzadas por los manifestantes en las vías, alteraron la tranquilidad de la población hasta horas de la tarde, cuando retornó la normalidad al pueblo.
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Reacción de la Policía
El comandante de la Policía Cesar, coronel Juan Pablo Guerrero explicó que esta alteración de orden público se originó por los estrictos controles que la fuerza pública realizada en los límites del Cesar y La Guajira para evitar el contrabando de gasolina de contrabando.
“Estando allí las unidades policiales un grupo de personas dedicadas a esta actividad ilegal impidió el procedimiento policial lanzando elementos contundentes que causaron lesiones a tres policías, fue necesaria la intervención del Esmad y garantizamos que todo volviera a la normalidad”, expresó el oficial.
Guerrero Vallejo reconoció que el contrabando de gasolina está tomando más fuerza en esta región y las personas dedicadas al negocio del combustible de contrabando han buscado otras rutas para ingresarlo y es así como las trochas son utilizadas para tal efecto.
Al cierre de esta edición, las autoridades policivas y militares aumentaron el pie de fuerza la zona para evitar nuevas alteraciones de orden público.