En una diligencia en la que compareció desde la cárcel, el antiguo jefe paramilitar Rodrigo Tovar Pupo, alias ‘Jorge 40’, decidió aceptar su responsabilidad en 13 hechos delictivos registrados entre los años 2000 -2005 en los departamentos del Cesar y Atlántico.
Entre esos el desplazamiento forzado de una familia en Codazzi y 12 crímenes cometidos en contra de abogados, agricultores, vendedores informales, un menor de edad, en ese mismo citado municipio, así como también en Barranquilla y Galapa, en el Atlántico.
“El material de prueba indica que estas personas fueron asesinadas por hombres armados que hicieron parte de las extintas estructuras que conformaron el denominado Bloque Norte, al parecer, fueron señaladas equivocadamente de estar involucrados en actividades delictivas o de colaborar con otras organizaciones ilegales que tenían inferencia en la región”, manifestó Deicy Jaramillo Rivera, directora especialista en contra de violaciones de derechos humanos de la Fiscalía.
Con la aceptación de los cargos, en su condición de cabecilla principal de las extintas Autodefensas Unidas de Colombia, AUC, ‘Jorge 40’ se somete a sentencia anticipada y la condena sería fijada en atención a los parámetros establecidos en la antigua Ley 600 de 2000.
Esta condena se sumaría a las que ya tiene por distintos delitos el exjefe paramilitar y por las que está privado de la libertad en la cárcel Picaleña, de Ibagué, Tolima.