Son muchos los temas para abordar con el dirigente sindical Igor Díaz, quien ahora es candidato del Pacto Histórico a la Cámara de Representantes por el departamento de La Guajira.
Igor Díaz es considerado como un dirigente sindical de reconocimiento nacional e internacional, sus luchas desde el Sindicato de Trabajadores de la Industria del Carbón, su papel de defensor de los derechos de los trabajadores del sector minero y del pueblo guajiro en general hoy lo convierten en personaje visible de la región.
¿Por qué decide meterse a la faena política electoral?
Desde el liderazgo sindical que asumimos en la Historia reciente de La Guajira, hemos comprometido además de esa responsabilidad, un compromiso con las luchas sociales del departamento y eso motivó a que él comité departamental del pacto histórico en La Guajira le propusiera a la organización sindical que presido, Sintracarbón, que hiciéramos parte de la iniciativa política en el departamento, enfocado en la lista a la Cámara de Representantes por el departamento de La Guajira y asumir por el momento histórico esa responsabilidad, la organización sindical evaluó esa solicitud y aprobó participar activamente, además definió que el nombre que debía estar en la lista era el mío y después de consultar con la familia, esposa e hijas y familiares directos, como parte fundamental de mis decisiones, asumí esta postulación y esta responsabilidad como un reto colectivo y propositivo para transformar la forma de hacer política en el departamento con un compromiso ético en el ejército de la postulación que asumimos si salimos Elegidos para cambiar la visión del liderazgo político en La Guajira.
¿Cómo gremio es una decisión, o es de carácter personal?
La decisión fue inicialmente gremial después de evaluar la situación institucional frente a los grandes temas laborales por resolver internamente en la empresa y la problemática de los trabajadores del carbón, que además de la acción sindical unificada que siempre hemos activado, definitivamente necesitan que algunos temas o puntos específicos los cuales afectan legalmente a los trabajadores activos y pensionados, se revisen en el órgano legislativo como es el Congreso de la República.
Y esa perspectiva permitió que posterior a la evaluación del contexto actual se asumiera unánimemente por parte de nuestra organización sindical Sintracarbón que mi nombre se inscribiera en la lista a la Cámara de Representantes y apoyar organizativamente esta propuesta política, igualmente, lo personal y familiar es necesario expresarlo ya que si bien no había en el imaginario inmediato asumir esta responsabilidad, la lucha que hemos librado nos proyecta a que siempre es necesario por mejorar las condiciones de nuestro departamento, cambiar la realidad administrativa y politiquera de quienes nos han gobernado históricamente que mantiene en postración nuestro departamento, y muchos otros aspectos sociales permitió que evaluara el momento, la coyuntura y las realidades asumidas y tomamos la decisión al lado de mi familia de asumir el reto, de interactuar entre mis obligaciones sindicales y la lucha política para derrotar y vencer a los politiqueros y a las élites mafiosas y corruptas del departamento, que mantienen a La Guajira en una oscuridad social por años y de la mano de quienes se han sumado a esta iniciativa, esperamos llegar al Congreso de la República y desde la Cámara de Representantes empezar a cambiar nuestra triste realidad social.
¿Cuál cree que son los problemas más importantes de La Guajira?
La guajira es un departamento postrado socialmente, olvidado por quienes nos han dirigido, sin quien nos defiendan del centralismo y además generando una crisis más profunda social y política cada día, con relevancia uno debe expresar que uno de los grandes problemas de La Guajira es el hambre, impactando las cifras que hoy más de 5.000 niños wayuu murieron por desnutrición por falta de alimentación y suministro de agua, está situación en cualquier parte es un escándalo de grande dimensiones, menos en La Guajira y en Colombia donde además para garantizar un derecho fundamental a la alimentación de las comunidades, les tocó ante la no intervención del estado y la permisividad frente a estos hechos repudiables, presentar una tutela ante la Corte Constitucional, que ante los elementos de juicio contundente por las violaciones a esos derechos fundamentales.
REDACCIÓN/EL PILÓN