El bramar intenso, insistente y triste de las crías llamando a sus madres, alertaron a Luis Martínez, pequeño productor ganadero, residente en el corregimiento de Los Haticos, jurisdicción de San Juan del Cesar, La Guajira, lo hicieron pensar de que algo andaba mal en su corral; de inmediato acudió a su pequeño hato que no es más que un corral de postes de Trupillos con alambre de púas alrededor, y vio que una de sus seis reses, tenía una herida profunda en la cabeza y las otras cinco no estaban, sólo los terneros desesperados, permanecían allí.
Buscó afanosamente en los rededores y a 500 metros del pueblo, en una trocha que comunica a varias fincas, en plena vía y a 20 metros de una torre de alta tensión de la interconexión eléctrica del Caribe, se encontró con la macabra escena, sus cinco vacas habían sido sacrificadas y descuartizadas por delincuentes, que sólo dejaron como prueba del hecho, el cuero, las cabezas y parte de las vísceras; el resto de la carne se la llevaron hasta un lugar desconocido hasta el momento y al parecer por el rastro, la transportaron en un vehículo grande, hacia la carretera que conduce a la cabecera municipal.
“Estas vaquitas son el único patrimonio que yo tenía para sostener a mi mujer con mis cinco hijos y con este robo, me dejaron prácticamente con las manos y piernas quebradas”, manifestó ‘Lucho’, como es conocido en el pueblo, quien es un hombre de campo, con voz entrecortada y como si tuviera un nudo en la garganta, producto del desconsuelo, la indignación e impotencia, por no saber a ciencia cierta quiénes son los criminales que lo dejaron en la calle.
Luis Martínez, solicitó que haya más presencia de las autoridades, policivas y militares, porque desde hace varios meses desde que el tráfico por la nueva vía San Juan – Badillo, se incrementó la delincuencia, no tanto en Los Haticos, sino que en toda la zona.
Se estableció que al tiempo que se hurtaban y descuartizaban las reses de Luis Martínez, otro pequeño productor del pueblo también era víctima de los delincuentes, se trata Daniel Cujia López, a quien le sacrificaron en el corral, una res recién parida.
Por su parte el presidente de la Junta de Acción Comunal de la población, José Cuello, expresó que es lamentable que se estén presentando estos actos delictivos en Los Haticos y las autoridades no hagan nada para frenarlos, debido a que esta comunidad desde hace varios meses ha venido denunciando la presencia de personas desconocidas y la Policía ni el ejército les han prestado atención.
“No se justifica que estas reses las hayan sacrificado ilegalmente a escasos 50 metros de una torre de energía, que debería estar vigiladas por el Ejército, para prevenir ataques de la subversión y aquí no haya ni un solo soldado”, manifestó el líder comunal.
Agregó que si bien es cierto que la construcción de la vía, Valledupar- Badillo- San Juan del Cesar, ha traído progreso y fuentes de empleo a la población, también está causando problemas, debido a que diariamente se cometen delitos en la región y los delincuentes utilizan como vía de escape esta carretera que solo está a 25 minutos de Valledupar.
Por: Jesús Eduardo Ariño Fragozo
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