CONCEJO DESCONOCIDO
La estrategia ‘Valledupar, como vamos’ dejó bien parado al alcalde Luis Fabián Fernández. El que sí quedó un poco mal fue el Concejo de Valledupar, y todo porque más de la mitad de sus integrantes son totalmente desconocidos entre la comunidad.
Los concejales de mayor reconocimiento, por sus debates e iniciativas, se cuentan con los dedos de una mano: César Acuña, ‘Tuto’ Uhía, Gustavo Guerra, ‘Gaby’ Muvdi, Leonardo Maya, ‘Toño’ Montaño, Walter Oñate y pare de contar. El resto, ‘que entre el diablo y escoja’.
Lo más curioso, es que acaba de ser elegida una mesa directiva integrada por tres de los ‘desconocidos’.
LOS ‘MELLOS’ DEL ‘MELLO’
Su expectativa resultó tan efectiva y eficaz, que muchos han querido clonarla y usurpar hasta sus espacios políticos.
José Santos Castro González, el de la expectativa ‘el mello va’, que se pasea por cuanto vehículo hay en Valledupar, es un pura sangre de la política que aspira a ser concejal de su municipio. Se dice que otros mellizos con las mismas inclinaciones electorales, han pretendido tomarse como propio el ya popular eslogan para sumar más adeptos a sus causas.
Castro González, nieto del patriarca Pepe Castro, ha dicho “el ‘único mello que va soy yo”, para que nadie sea víctima de engaños. Otra señal para que no haya confusiones: es el afortunado novio de la ex señorita Cesar, Marisabella Mendoza. ¡La tiene toda!
QUINTÍN, EL FAVORITO
Los sondeos de opinión, realizados por distintos medios de comunicación, para definir cuál de los precandidatos a la Gobernación del Cesar por el Partido Conservador tiene mayores posibilidades, favorecen ampliamente a Quintín Quintero, un político que, literalmente, siempre anda con las botas puestas.
Quintín, quien superó a sus copartidarios por un abrumador porcentaje, avanza en su campaña política, buscando el afianzamiento de su candidatura entre las llamadas bases populares, que finalmente son las que deciden.
Mientras la popularidad de Quintín aumenta entre el ‘pueblo pueblo’, la cúpula ‘cristiana’ se mantiene indiferente, como a la espera de algo. Ojalá no se equivoquen.