BOGOTA. AP. El gobierno del presidente Juan Manuel Santos aún no ha autorizado un operativo humanitario para buscar a dos uniformados en poder de las FARC, cuya entrega se frustró el fin de semana, al tiempo que aseguró que nadie cuenta con autorización oficial para contactar a los rebeldes sobre temas de paz.
“El gobierno no ha autorizado a nadie, a nadie, ni piensa hacerlo. Que quede claro: a nadie para que sostenga ningún tipo de contactos con grupos al margen de la ley”, dijo Santos en un acto en la casa de gobierno.
Y sobre las dos liberaciones frustradas el domingo, ahora delegados del gobierno y del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) analizan cuándo y cómo se puede hacer.
“En este preciso momento estamos evaluando….con el CICR la situación para la continuación del proceso de liberaciones”, indicó.
“Estamos incluso considerando la posibilidad de hacerlo por tierra, pero no queremos improvisar y tomaremos una decisión cuando estemos seguros, sólo cuando estemos seguros de que la liberación pueda llevarse a cabo sin ninguna dificultad y sin ningún problema”.
Aunque el Presidente no mencionó directamente a la ex senadora Piedad Córdoba, que ha trabajado en pro de las liberaciones desde hace más de dos años, sus palabras parecieron descartar una iniciativa conocida el fin de semana, cuando se divulgó una entrevista de Córdoba en la que afirmaba que quería que Santos le diera luz verde para dialogar de paz con los insurgentes.
Pero tras el traspié del domingo, Córdoba ha mantenido silencio y sólo ha dicho en un breve mensaje de Twitter que dejaba en voz del gobierno las explicaciones por la frustrada entrega del domingo.
“No hay nada que más aleje la paz que estar permanentemente hablando sobre ella”, dijo Santos.
“Cada cosa tiene su momento y este no es el momento para esa discusión, ni mucho menos para lanzar propuestas especulativas y lo digo con toda claridad”, agregó.
Christophe Beney, jefe de la delegación del comité de la Cruz Roja en Colombia, dijo en una entrevista con radio Caracol, que el domingo no se pudo recoger a los dos retenidos porque hubo “un error” en las coordenadas entregadas por Córdoba, quien a su vez las había recibido de forma confidencial de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).