“Yo traté de quitarle la pistola a quien me tenía apuntado para atracarme, pero me cayó otro de los delincuentes encima y me tiraron a matar, porque me dieron tres tiros y ninguno de ellos me impactó en órganos vitales”, afirmó en la mañana de ayer, Pedro David Andrade Arrieta, un ganadero y agricultor de 70 años de edad.
Los hechos ocurrieron a las 5:00 de la mañana del pasado miércoles, frente a su casa localizada en el barrio El Bosque del municipio de El Copey, Cesar, donde esperaba a uno de sus nietos que a diario lo transportaba a su finca ‘La Florida’, ubicada en la vereda La Libertad, sector de la línea férrea.
El ganadero Andrade Arrieta recibió las heridas superficiales en la espalda, en el tórax y en la mano izquierda, cuyo proyectil le habría causado afectación en la parte ósea, lo que motivó a sus familiares y vecinos que salieron a auxiliarlo para llevarlo inicialmente al Hospital San Roque de El Copey y luego fue remitido al Hospital Rosario Pumarejo de López, en Valledupar, donde los médicos indicaron que se encuentra fuera de peligro.
“Yo estuve a punto de quitarle el arma a ese tipo, ya lo tenía dominado, pero los otros delincuentes se bajaron de la motocicleta y ahí si no pude hacer más nada. Por fortuna, Dios me dio otra oportunidad, porque los tiros no afectaron signos vitales. Yo no sé qué me iban a quitar, porque casi no llevaba plata, porque iba para el monte.
Ellos no me dijeron nada, cuando sentí fue que uno de los parrilleros se bajó y se me abalanzó encima y yo reaccioné”, relató el sobreviviente.
Los familiares del afectado denunciarán el hecho ante las autoridades locales para que inicien las investigaciones respectivas y de esa manera traten de capturar a los responsables.
Por Abdel Martínez Pérez