El periódico capitalino El Espectador hizo públicas varios audios grabados por las autoridades en su lugar de reclusión, al excongresista del Cesar, Pedro Muvdi, en las que se da cuenta de su influencia política para manejar la contratación en este departamento.
El exrepresentante a la Cámara, Pedro Muvdi, está privado de la libertad desde el 2014 y enfrenta un proceso por presuntos nexos con el paramilitarismo, especialmente con el bloque Norte que era comandado por el cesarense Jorge 40. Además, Muvdi es acusado de desviar millonarios recursos del sector salud con destino a ese grupo ilegal.
Pedro Muvdi fue llevado a la cárcel cuando adelantaba campaña como candidato al Senado de la República y desde entonces su presencia política en el Cesar se creía casi nula, pero según el periódico capitalino, el dirigente liberal no ha dejado de manejar sus cuotas burocráticas en la región, como tampoco ha desaparecido de la contratación regional.
Señala El Espectador que conoció decenas de audios grabaos por el Cuerpo Técnico de Investigación –CTI- de la Fiscalía y que están en poder de la Fiscalía, en los que el dirigente Pedro Muvdi habla con su esposa, sus hijos y colaboradores políticos de su grupo.
“Las interceptaciones revelan el poder de un parapolítico que insiste en su inocencia, pero de cuyos audios se desprenden sólo sospechas. Allí se escucha cómo imparte instrucciones para mantener la burocracia y los contratos viales del Cesar, cómo algunos interventores tuvieron que ir hasta la cárcel a rendirle cuentas o su presunta injerencia en el Instituto Geográfico Agustín Codazzi. Asimismo, se evidencia su impaciencia por su detención en la Escuela de Carabineros de la Policía en Bogotá, sitio del que, sin embargo, salía como Pedro por su casa cada que quería, acompañado de oficiales, para deleitar su paladar en finos restaurantes (por eso fue enviado a La Picota hace un año)”. Dice el informe.
De igual manera se menciona el nombre de Layonel Arenas, exdirector de Invías en el Cesar y contacto telefónico con Muvdi, hablando sobre dineros y contratos relacionados con el tema vial en el departamento.
“Pero el caso Muvdi trae otras charlas inquietantes. Además de relacionar al excongresista como un hombre cercano a Simón Gaviria, hoy director de Planeación (el funcionario estaba en Bahamas cuando este diario intentó ubicarlo el viernes pasado), en dos conversaciones más aparecen sorpresas. Allí se evidencia la reunión que tuvieron en Palacio la esposa y la hija de Muvdi con el secretario privado del presidente, Enrique Riveira.
El encuentro ocurrió el 13 de agosto de 2014. En horas previas, Muvdi llamó a Libia para decirle cómo debía hablarle al presidente (originalmente, según los audios, la reunión era con él). Muvdi le dijo a su esposa que iniciara la charla recordando que él había trabajado duro -desde la cárcel- para ponerle votos a Santos en la segunda vuelta presidencial”. Este es el audio del 2 de agosto de 2014 en el que habla Libia, esposa del excongresista Muvdi, con un aliado político no identificado sobre el director de Planeación, Simón Gaviria”, revela la información publicada por El Espectador.
Finalmente la esposa de Muvdi no fue atendida por el presidente Santos, sino por su secretario privado, Enrique Riveira, lo que habría molestado al excongresista.
“No obstante, Muvdi se decepcionó cuando Libia le reportó ese mismo día que el presidente Santos no la había atendido y que en su lugar lo hizo su secretario privado, Enrique Riveira. Libia, se oye en la charla, le dijo a su esposo que “Quique” era también del Cesar y que le “quedó claro todo, todo”. Se refería a que le contó en detalle los supuestos abusos de la Corte en el caso Muvdi, en especial del magistrado coordinador Iván Cortés. Según la versión de Libia, registrada en una interceptación, Riveira les preguntó a ella y a Fadia durante el encuentro: “¿Y les gustaría si se puede de pronto cambiar a otro magistrado?”, a lo que Fadia replicó: “¡Claro, eso es lo que nos interesa!”. Se referían, por supuesto, a tratar de remover a Cortés de ese caso”.
Indica EL Espectador que la versión de la señora Libia, esposa de Pedro Muvdi, fue negada por el secretario Rivera, quien manifestó que “lo que asegura la señora Muvdi en la conversación es falso. Me limité a escucharla porque el presidente no la recibió. La señora y su hija mencionaron que no creían que el proceso (en la Corte Suprema) tuviera las garantías necesarias, pero en ningún momento hice ofrecimiento o compromiso alguno. Por ser un tema concerniente a la justicia y no al presidente, no le comenté a él ni a nadie más de esa conversación”.
“Al margen de lo que determine la justicia, queda claro que el otrora todopoderoso del Cesar, Pedro Muvdi, ha buscado por todos los medios tumbar su caso. No ha ahorrado esfuerzos para gestionar citas con políticos poderosos y hombres cercanos a la Casa de Nariño, así como para seguir manteniendo su poder tras bambalinas.
La Corte Suprema rastrea estas llamadas y tiene en su poder nuevas pruebas de presuntas movidas para gestionar retractaciones de testigos o el pago de dineros (en los audios se oye que se paga con “mazorcas” en referencia a la palabra “millones”) en contratos. El magistrado Cortés continúa coordinando la parapolítica”, denuncia El Espectador.
Por Edilberto Castillo Rada