Gustavo Petro, precandidato presidencial, dio a conocer el pasado martes en el cara a cara organizado por Semana y el diario El Tiempo, que otorgará subsidios de $500.000 pesos mensuales a casi 6 millones de mujeres cabeza de familia y adultos mayores sin pensión.
En materia social, la noticia que entregó el precandidato no se toma por descabellada conociendo que el país atraviesa un momento social difícil tras 2 años de pandemia como consecuencia de la covid-19, pero sí en materia fiscal, pues en los últimos años aumentó el gasto y se redujo el recaudo.
Para llevar a cabo dicho proyecto, Petro habló sobre una reforma tributaria que le permita tener los ingresos o recursos suficientes para poder financiar las ayudas a mujeres y adultos mayores.
“En Colombia no hay subsidios, hay limosnas, es diferente; la limosna mantiene a la persona en la pobreza, por eso son de $160.000, $70.000 para jóvenes, $90.000 para viejos. Es mantener a una persona en la pobreza porque la línea de la pobreza, según el Dane, es de $350.000 pesos”, dijo el candidato del partido Pacto Histórico.
Sin duda alguna la propuesta de Petro resulta ambiciosa y polémica, incluso, seguramente pondrá a los economistas del país a opinar sobre el tema.