El 21 de octubre del año 2003, Wilfrido Chantrix Quiñonez, fue reportado por el Ejército como muerto en un enfrentamiento armado con guerrilleros del Eln y las Farc en zona rural del corregimiento de Llerasca, jurisdicción de Codazzi, en el norte de Cesar.
El operativo estuvo a cargo del grupo de contraguerrilla ‘Contera Uno’ del Batallón de Artillería Número 2, La Popa de Valledupar, integrado por el cabo Alexander Escalante Cabarcas, los soldados profesionales Wilman Enrique Tejeda Ferrer, Daimer Centeno Cárdenas, Jorge Enrique Dorado Triviño y José Rafael Campo Maza, quienes estaban bajo el mando del sargento, José de Jesús Rueda Quintero.
Sin embargo, familiares y amigos de Chantrix Quiñonez denunciaron que el operativo de los militares era un montaje, porque a esta persona nunca la conocieron como guerrillera o integrante de algún grupo armado ilegal. Aseguraron que se trataba de un humilde reciclador de Codazzi, que la noche del crimen se encontraba en su casa y que además padecía de trastornos mentales.
Lo anterior, sumado a la inspección técnica a cadáver y estudios de balística llevaron a la Fiscalía a desvirtuar las versión del Ejército y a iniciar una investigación contra los militares por el delito de homicidio en persona protegida y fabricación, tráfico o porte de armas de fuego de uso privativo de las fuerzas armadas.
Según el estudio de balística realizado por los peritos del Cuerpo Técnico de Investigación, CTI, la víctima fue impactada desde varios ángulos, con trayectorias opuestas, e incluso desde la parte posterior, con lo que se descarta el enfrentamiento pregonado por los seis procesados.
Fue así como la Fiscalía 65 Especializada Delegada ante los Jueces Penales del Circuito de la Unidad de Derechos Humanos y Derecho Internacional Humanitario de Bucaramanga llevó a juicio a Wilman Enrique Tejeda Ferrer, Alexander Escalante Cabarcas, Daimer Centeno Cárdenas, Jorge Enrique Dorado Triviño, José Rafael Campo Maza y a José de Jesús Rueda Quintero.
El juicio estuvo a cargo del Juzgado Tercero Penal del Circuito de Valledupar, que el pasado 10 de junio los halló responsable de los delitos investigados y los condenó a 34 años de prisión.
Por Redacción Judicial / EL PILÓN