Un atentado a bala cobró la vida del intendente de la Policía Jorge Armando Cely Macía, en hechos registrados en inmediaciones de la vía Curumaní- Pailitas, centro del Cesar.
De acuerdo a las primeras versiones, se trató de un hostigamiento en contra de una patrulla de la Policía Nacional que transitaba por el sector conocido como Caño Grande.
El uniformado cumplía con su labor de vigilancia en carreteras cuando recibió un disparo en la cabeza desde una montaña proveniente, al parecer, de un francotirador.
“Se encontraban haciendo labores de verificación en contra del narcotráfico y terrorismo, en circunstancias que son materia de investigación, desconocidos disparan contra el puesto de control donde asesinan al intendente”, dijo el coronel Jesús Manuel de los Reyes Valencia, comandante de Policía Cesar, quien agregó que en la zona delinque el ‘Frente Camilo Torres’ del ELN.
El oficial, natural de Boyacá, residía en Curumaní, era papá de dos hijos y llevaba 19 años y seis meses en la institución.
El Gobernador (e) Wilson Solano reaccionó a la noticia, solicitándole al ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, un mayor acompañamiento para combatir el crimen en el departamento.
El asesinato ocurrió a pocas horas de llevarse a cabo un consejo de seguridad liderado por la Gobernación del Cesar en el que participaron los comandantes del Ejército Nacional y la Policía.
El encuentro fue producto precisamente de otros atentados simultáneos dirigidos a las estaciones de Policía de Curumaní y Pailitas, el reciente sábado.
El secretario de Gobierno departamental, Eduardo Campo, manifestó que se comprometieron con el aumento del pie de fuerza y la remodelación de dos estaciones de Policía.
“Vamos a invertir en la estación de Pailitas y Pelaya, se van a remodelar en infraestructura, la de Curumaní no se puede intervenir porque hace parte de una consultoría en donde el mismo municipio está adelantando su estudio. Y estas se harán con recursos de la Gobernación”, dijo Campo.
En materia de seguridad, en el consejo plantearon que dos pelotones de la Primera División del Ejército entrarían para reforzar la seguridad en Pelaya, Pailitas y Curumaní.
“Para nadie es un secreto que el ELN nos tiene azotados en esos tres municipios. Obviamente, se están adelantando todas las investigaciones y se habla de grupos subversivos, pero puntualicé que posiblemente el ELN es quien está ocupando territorio, haciendo presencia en el centro del departamento”, acotó el secretario.
El alcalde de Pailitas, Carlos Toro, por su parte fue enfático en decir que falta mucho por trabajar en el municipio pero que se dio un paso adelante.
“Hay un avance pero la tranquilidad no llega hasta ver materializadas las acciones. Sin embargo, se puede decir que fue fructífero el consejo”, puntualizó Toro.