Como consecuencia del fuerte invierno que azota al sur del Cesar, desde hace ocho días, los aguachiquenses vienen sufriendo constantes racionamientos. De acuerdo con voceros de la Empresa de Servicios Públicos, la situación se presenta porque la avalancha de la Quebrada Buturama, dejó averiado el sistema de captación.
Desde hace 13 días, el caudal de la quebrada Buturama se ha aumentado en un 95 por ciento, lo que afecta considerablemente el suministro de agua al acueducto porque toda se encuentra turbia.
“Nosotros hemos realizado estos racionamientos, desde hace varios días, porque es necesario darle más tratamiento al agua que está totalmente enlodada y porque la presión ha disminuido, a raíz de la avería que hubo en el sistema de captación”, precisó un funcionario de la ESP, consultado por EL PILÓN.
Así mismo, el funcionario comentó que durante el primer semestre del 2010, con la colaboración del personal de planta, se realizaron distintas campañas para concientizar a los ciudadanos sobre la importancia del ahorro y la buena utilización del recurso hídrico con el que cuentan, ya que por estos días se debe conservar porque las lluvias en la parte alta continúan y con ellas el racionamiento.
Nuevas medidas
Con el objetivo de distribuir de manera eficiente el líquido con el que cuenta el acueducto, se empezó a llevar a cabo racionamientos diarios, en toda la zona urbana.
“Lo que buscamos con estos racionamientos es poder desarenar completamente el tanque de almacenamiento que está ubicado en la zona alta de Aguachica, para – de esta manera- poder dar presión a la tubería de distribución en las horas en que se envíe el líquido a las viviendas del casco urbano”, concluyó la fuente.
Impacto ambiental
Una de las causas del desabastecimiento de agua en Aguachica, es la tala indiscriminada de árboles cerca de los yacimientos de las quebradas que sirven de suministro para el acueducto municipal y debido a ello, en épocas como la actual donde se presentan lluvias a diario, las avalanchas generan taponamientos en las tuberías de captación.
“Los dueños de las fincas de la zona talan los árboles para continuar con la expansión agropecuaria; actualmente, muchos de los terrenos de la parte alta de las quebradas son potreros de pastoreo o cultivos de fríjol y maíz”, aseguró el vocero de la ESP.
Esta misma situación se presenta en donde nace la quebrada, pues la deforestación permite que los rayos del sol y el calor alcancen las aguas de los yacimientos de manera directa, acelerando el proceso de evaporación en épocas de verano.